Limpiar una pared de cemento

Los procedimientos más eficaces para limpiar paredes de cemento requieren el uso de máquinas hidrolimpiadoras o de cepillos de cerdas de acero
Por EROSKI Consumer 9 de abril de 2002
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Imagen: Doug Aghassi

Las paredes de cemento, sobre todo las más rugosas, suelen acumular mucha suciedad con el paso del tiempo. Quitar esos residuos puede ser difícil: en muchas ocasiones requiere el empleo de detergentes, fregasuelos y otros productos especializados. Este artículo detalla dos procedimientos para quitar la suciedad de una pared de cemento: con una hidrolimpiadora o con cepillos de cerdas de acero. También explica cómo pintarla, en el caso de que su aspecto esté muy deteriorado.

Las paredes de cemento por lo general retienen mucha suciedad, que se acrecienta cuanto más rugosa es su terminación. Esto se puede observar en superficies de exteriores, sobre todo laterales y fondos de casas o edificios, que pasan algún tiempo sin limpiarse y se oscurecen de forma notoria. El proceso de limpieza no es complicado, pero en ocasiones puede demandar bastante tiempo y esfuerzo.

Quitar la suciedad de la pared de cemento con una hidrolimpiadora

El modo más simple de limpiar estas superficies es por medio del uso de una máquina hidrolimpiadora. La presión que el chorro de agua ejerce sobre la pared logra despegar la mayor cantidad de suciedad impregnada sobre ella.

El modo más simple de limpiar las paredes de cemento es por medio del uso de una máquina hidrolimpiadora

Una forma de colaborar con la acción de la máquina es añadir al agua detergente o alguna otra sustancia limpiadora. Esta sustancia puede ser un simple limpiador de suelos o bien productos especiales diseñados para la limpieza de superficies de cemento. En cualquiera de estos casos, es necesario prestar mucha atención a las instrucciones de uso de cada producto.

Por otra parte, si se emplea cualquier producto limpiador de esta clase, es necesario después aclarar la pared con agua limpia.

Limpiar con cepillos de cerdas de acero

Otra posibilidad es pasar por la pared un cepillo de cerdas de acero. Si hay mucha suciedad, antes de pasar el cepillo se puede aplicar sobre la superficie una mezcla de tres partes de potasa cáustica (llamada también hidróxido de potasio) con una de agua. Esta sustancia tiene un efecto corrosivo que afloja la resistencia del polvo, el tizne, el moho y el resto de impurezas que se deban quitar de la pared.

Si se aplican sustancias limpiadoras corrosivas, conviene tomar una serie de precauciones, como el uso de guantes y gafas protectoras

Del mismo modo que si se emplea detergente u otro limpiador especial, si se aplica esta mezcla a base de potasa será necesario aclarar más tarde con agua limpia.

Tanto si se utilizan limpiadores especiales (más potentes que los líquidos normales para fregar el suelo) como si se utiliza potasa o cualquier otra sustancia corrosiva, conviene tomar una serie de precauciones mínimas. Las más importantes consisten en el empleo de guantes y gafas protectoras, ya que la piel de las manos y los ojos son las partes del cuerpo que quedan más expuestas y que mayor peligro corren de resultar afectadas por la irritación que esos productos pueden ocasionar.

Si se ha de trabajar durante mucho tiempo con estos elementos, convendrá también usar ropa que cubra todo el cuerpo, con mangas largas y ceñidas al cuerpo, y, en ocasiones, también mascarillas para proteger las vías respiratorias.

Si no se puede limpiar, mejor pintar

A veces, una pared se encuentra tan deteriorada por los efectos del paso del tiempo, que una limpieza no es suficiente para reacondicionar su aspecto y se hace necesario pintarla.

Para ello, hay que reparar las posibles grietas y desconchones con cemento o masilla especial para exteriores. Se pueden añadir también preparados antihumedad, para que resistan mejor el efecto del agua, sobre todo si la casa está situada en una zona muy lluviosa o con altos niveles de humedad en el ambiente.

Tras aplicar el cemento o la masilla, se debe dejar que seque bien y luego lijar la superficie con alguna lija gruesa, para emparejar las partes reparadas y las que no se han tocado. Antes de pintar, habrá que limpiar bien y luego utilizar un sellador como capa de imprimación.

El tipo de pintura más recomendado para su utilización es el esmalte sintético o pintura plástica, vinílica o acrílica.

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