El Consejo de Ministros del próximo viernes aprobará una reducción general de los gastos no financieros previstos en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2009 por una cuantía de 1.500 millones de euros. El Gobierno pretende garantizar de esta forma las ayudas a las personas que se han quedado sin trabajo.
Gobierno e interlocutores sociales estudian medidas adicionales para «mantener la cobertura de la prestación por desempleo sea cual sea el número de parados»
El anuncio de este recorte lo hizo ayer el presidente del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero, durante su intervención en el Parlamento. Zapatero reconoció que la cifra de desempleados (3,3 millones actualmente) no ha tocado techo todavía y admitió que es imposible adivinar cuándo lo hará.
El citado recorte supondrá una reducción del 2,6% del gasto corriente previsto en los Presupuestos y afectará a todos los ministerios y partidas. No obstante, Zapatero precisó que no se tocarán los sueldos de los empleados públicos ni los programas de protección social, y tampoco se rebajarán los fondos extraordinarios de inversión creados para generar empleo.
El jefe del Ejecutivo subrayó que se trata de un recorte adicional que se sumará al «esfuerzo» ya realizado en los PGE, que incluyeron un reducción del 1,8%. El Gobierno espera destinar los recursos así liberados a financiar las partidas más perjudicadas por el deterioro de la economía, como las prestaciones por desempleo. Rodríguez Zapatero avanzó además que el Gobierno y los interlocutores sociales estudian medidas adicionales para «mantener la cobertura de la prestación por desempleo sea cual sea el número de parados».
También hubo un aviso para la banca: el Ejecutivo, señaló el presidente, estará «especialmente atento a la evolución del crédito», consciente de que la recuperación pasa «necesariamente» por que el dinero «fluya de las entidades financieras a las familias y empresas».
Los recursos que destinará el Gobierno a paliar los efectos de la crisis durante el bienio 2009-2010 rondarán los cinco puntos del Producto Interior Bruto (PIB), dos puntos por encima de lo permitido por el Pacto de Estabilidad de la UE. Ello va a suponer a nuestro país un expediente por déficit excesivo, según anunció ayer la Comisión Europea. Otros seis miembros de la zona euro también serán expedientados por motivos similares.
Bruselas tiene asumido un incremento de los déficit presupuestarios entre los socios de la UE por la actual coyuntura económica. Pese a ello, no ha renunciado a reclamar un retorno a las condiciones estándar del Pacto de Estabilidad, en un plazo de tiempo lo más breve posible, particularmente mediante la aplicación inflexible de la condición de reducir un cuarto de punto al año la parte estructural del déficit.
El vicepresidente económico del Gobierno, Pedro Solbes, reconoció que en abril o mayo se producirá el expediente contra España, aunque confió en que en 2011 el desequilibrio de las cuentas públicas esté por debajo del 3% del PIB. Solbes calculó que los planes de estímulo económico puestos en marcha por el Gobierno supondrán entre el 4,9% y el 5% del PIB entre este año y el próximo, frente al 1,2% de media de gasto en este capítulo del conjunto de los países europeos.
El comisario de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia, reiteró que el Ejecutivo comunitario cumplirá con el Pacto de Estabilidad y expedientará a los países que no cumplan con la normativa, aunque reconoció que el esfuerzo que realizarán los países este año y el próximo en materia de gasto público para paliar la crisis será equivalente a entre el 3% y el 4% del PIB comunitario.
