El grupo agroquímico suizo Syngenta admite que vendió «por error» a EE.UU. a finales de diciembre de 2004 un tipo de maíz modificado genéticamente que no está autorizado. Este maíz, denominado «BT 10», está todavía en fase «de desarrollo previa a su comercialización», según la empresa, que ha descartado cualquier riesgo para la salud o el medio ambiente.
Syngenta ha asegurado en este sentido que el Departamento de Agricultura de EE.UU. y la Agencia de Alimentos y Fármacos (FDA) ya confirmaron la seguridad del «BT 10» para la alimentación y el medio ambiente.
Asimismo, ha apuntado que las plantaciones y semillas almacenadas que contenían la proteína «BT 10» han sido identificadas y destruidas, o lo serán en breve. La firma agroquímica realizó un cultivo de 15.000 hectáreas entre 2001 y 2004.
En EE.UU. está autorizada la venta y el consumo de maíz «BT 11», una variedad similar al «BT 10», desde 1996, año en el que también fue homologado por las autoridades japonesas para consumo animal y humano, mientras que en la Unión Europea (UE) fue autorizado en 1998.
En Bruselas, la Comisión Europea supo el miércoles que EE.UU. vendió a España maíz transgénico de la mencionada variedad no autorizada, pero no para cultivo ni consumo, sino sólo para investigación. En concreto, EE.UU. envió a Francia y España 100 kilogramos de este maíz.