El brote de gripe porcina detectado el viernes pasado en México y Estados Unidos ha provocado ya la alerta en España. El número de casos sospechosos en todo el país se ha elevado a 19 después de que la consejera de Salud de la Generalitat de Cataluña, Marina Geli, haya anunciado esta mañana que en esta comunidad hay 10 enfermos con los síntomas de la enfermedad. Todos ellos se encuentran bajo vigilancia médica. El resto de casos que se investigan se han detectado en Almansa (Albacete), Bilbao, Valencia, Teruel y Algeciras (Cádiz). Hoy o mañana se confirmará si estas personas padecen gripe porcina. En todos se trata de jóvenes que han vuelto de México en los últimos días, por lo que parece probable que padezcan la enfermedad. Ninguno de ellos reviste gravedad y están respondiendo bien al tratamiento.
La ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, compareció ayer en la sede del Ministerio para dejar claro que «no estamos ante una situación de emergencia» en España, sino de «tranquilidad». De confirmarse que se trata de afectados por la gripe porcina, que se ha cobrado 81 víctimas en México según la Organización Mundial de la Salud (OMS), Jiménez indicó que se establecería un protocolo de actuación en colaboración con las comunidades autónomas.
Protocolos activados
Asimismo, los responsables sanitarios cuentan con las listas de pasajeros de los vuelos para avisarles en caso de peligro. No obstante, la ministra recomendó a todos los pasajeros que hayan estado en California, Texas o México que vigilen su salud durante los próximos diez días. «Si presenta fiebre, tos o dificultad respiratoria, contacte de inmediato con los servicios sanitarios de su comunidad autónoma e informe del viaje y la fecha de regreso», pidió la responsable de Sanidad.
Con una detección precoz y el tratamiento adecuado, la gripe porcina se cura
Trinidad Jiménez insistió en que no existe ningún riesgo de transmisión por consumo de productos porcinos, ya que el contagio sólo se produce por el aire, de humano a humano. Los síntomas son muy similares a los de una gripe convencional, lo que puede conllevar a un cierto alarmismo entre la población.
Por su parte, el director del Centro de Referencia de Encefalopatías y Enfermedades Emergentes, Juan José Badiola, precisó que con una detección precoz y el tratamiento adecuado, la gripe porcina se cura. En la misma línea, Ángela Domínguez, de la Sociedad Española de Epidemiología, señaló que España, gracias a los planes y protocolos activados con motivo de la gripe aviar, está «mejor preparada» para hacer frente a una eventual propagación de la gripe porcina. Ambas enfermedades se tratan con los mismos medicamentos.
Medidas en los aeropuertos
Al tratarse de una enfermedad importada, es fundamental establecer medidas de control en los aeropuertos. En Barajas, por ejemplo, funcionarios de Sanidad se encargan de anotar los datos personales de todos los pasajeros procedentes de México. A la terminal madrileña llegaron el pasado sábado tres vuelos desde la capital mexicana. Ayer aterrizaron cuatro aviones más desde esa ciudad y otros dos desde Cancún, con unos 1.500 pasajeros en total.
Los empleados de Sanidad se sitúan en los túneles móviles a través de los cuales se sale del avión para distribuir entre los viajeros un cuestionario en el que deben escribir nombre y apellidos, número del pasaporte y de teléfono, así como el lugar de residencia en España. Asimismo, el pasaje recibe una hoja con consejos por si notan molestias sospechosas en el plazo de diez días.
El Ministerio ha divulgado además varias indicaciones para las aerolíneas que vuelan regularmente a México. Hasta nueva orden, los aviones deberán despegar equipados con guantes, mascarillas y batas. En el vuelo de regreso, los pilotos y los auxiliares deberán aislar de inmediato a cualquier pasajero que parezca tener gripe, el cual será atendido por un solo miembro de la tripulación «provisto de medidas de protección personal». El comandante informará a la torre de control para que movilice a los sanitarios.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha instado a la comunidad internacional a redoblar la vigilancia ante la posibilidad de que estemos a las puertas de una posible pandemia. Según la agencia sanitaria, la situación es “muy grave e impredecible”.
El sistema de alerta pandémica de la OMS tiene seis grados y en la actualidad el brote de gripe porcina en humanos se encuentra en la fase 3, cuando se considera que el virus está infectando a personas, pero que todavía no hay una transmisión estable de persona a persona. La fase 6, la más grave, se declara cuando se confirma que existe una transmisión permanente de persona a persona.
