La tecnología de la información tendrá no sólo un enorme impacto en la configuración de la sociedad del futuro, sino que puede ayudar de modo importante al desarrollo sostenible del planeta en lugar de acelerar su destrucción.
Así lo asegura la organización ecologista Fondo Mundial de la Naturaleza (WWF) en un informe titulado «Desarrollo sostenible a la velocidad de la luz», según el cual esa tecnología puede tener un impacto muy positivo en las actividades humanas «si se gestiona como es debido».
Por ejemplo, puede contribuir al ahorro de energía tanto en edificios comerciales o industriales gracias al control remoto, o limitar, gracias al comercio por Internet y a las videoconferencias, el despilfarro de recursos energéticos que suponen los transportes y continuos viajes de negocios.
El estudio demuestra asimismo que la tecnología de la información puede contribuir a la actividad conservacionista en todo el planeta al posibilitar un mayor control de la explotación de la tierra y ayudar a descubrir, mediante una red de satélites, actividades ilegales, entre ellas la tala ilegal de bosques protegidos.
Según los autores del informe, para conseguir esos objetivos de desarrollo sostenible es preciso no sólo avanzar en distintas áreas estratégicas, entre ellas el transporte de mercancías, sino cambiar al mismo tiempo las actuales pautas de producción y consumo.
«La tecnología de la información nos ofrecerá oportunidades inéditas para a la vez conservar lo que de mejor tienen nuestras sociedades y desarrollar nuevas y mejores soluciones», afirma Dennis Pamlin, colaborador de la sección sueca del WWF y coordinador del estudio.
Peligros
Según Pamlin, «el mayor peligro globalmente es que se use ese tipo de tecnología únicamente para hacer más eficaz la economía en beneficio de un puñado de grupos interesados sólo en los beneficios a corto plazo».
El estudio aboga por «políticas decididas» que impidan incentivos equivocados que sólo empeorarían algunas de las actuales tendencias negativas desde los puntos de vista ecológico, social y económico.
La tecnología de la información puede ser lo mismo una fuerza del bien que del mal: en el primer caso ayudará a resolver el problema del hambre, eliminar los actuales problemas de transporte y revitalizar los regímenes democráticos, apunta el informe.
Si no se gestiona debidamente, acelerará, por el contrario, el consumo de los recursos disponibles, introducirá nuevos materiales tóxicos y creará una brecha digital que agravará el ya hoy por hoy desigual reparto de la riqueza y de la influencia.
El informe del Fondo Mundial para la Naturaleza lo integran nueve trabajos de otros tantos expertos en tecnología de la información y su objetivo, según los editores, es colmar el foso existente entre los especialistas en esa tecnología y quienes tienen poder de decisión política o económica. WWF expresa su convicción de que todos esos grupos deben dialogar con mayor frecuencia y franqueza entre sí en beneficio del desarrollo sostenible del planeta.
