La compra de un piso se lleva el 43,3% de la renta media de los hogares

Se trata del nivel más alto en diez años y supera con creces el límite recomendado
Por EROSKI Consumer 6 de febrero de 2007

Las cuotas para pagar el primer año de hipoteca de un piso se llevaban a finales de 2006 el 43,3% de la renta bruta disponible de las familias españolas, según datos del Banco de España. Es el nivel de esfuerzo más alto desde comienzos de 1996. En sólo dos años, ese ratio, que supera con creces todas las recomendaciones de las entidades de crédito, ha crecido más de ocho puntos porcentuales.

Los cálculos del órgano emisor se basan en la hipótesis de un hogar tipo que afronta la adquisición en el mercado libre de una casa de 93 metros cuadrados construidos y para la que firma una hipoteca estándar por el 80% del valor del piso. Los analistas señalan el 33% de la renta como límite a partir del cual el abono del crédito puede generar problemas financieros. Al terminar 2005 el nivel de esfuerzo se situaba en el 35% y un año después, en el 36,8%.

El Banco de España matiza el dato y pone en valor las ayudas fiscales a la compra. Así, el esfuerzo se reduce al 30,4% de la renta bruta disponible si se tiene en cuenta el 15% de la inversión como cantidad deducible en la declaración de la renta, sin superar los 9.000 euros anuales, a que se tiene derecho cuando se adquiere la primera vivienda habitual. Beneficios que el año pasado supusieron un gasto para el Estado de más de 3.200 millones de euros.

La dificultad para lograr un piso en propiedad es consecuencia de dos factores. Por un lado, el precio de las casas, que sigue creciendo a un ritmo tres veces el de inflación, y, por otro, la escalada de los tipos de interés. En 2006, el euríbor, la principal referencia para fijar el precio de las hipotecas, creció más de un punto porcentual y se situó en el 4,064% al finalizar el pasado mes de enero.

Tipos al 3,5%

Los analistas financieros prevén que el Banco Central Europeo (BCE) mantenga los tipos de interés para la zona euro inalterados en el 3,5% en su reunión del próximo jueves, debido a que la inflación se ha estabilizado.

El Consejo de Gobierno del BCE tratará la política monetaria de la eurozona en un momento en que la subida de los precios se mantiene desde septiembre del pasado año por debajo del 2%, cota máxima que fija la entidad para garantizar la estabilidad de la inflación. No obstante, los analistas no descartan que la institución monetaria suba los tipos otro cuarto de punto en marzo.

La inflación anual en la eurozona se situó en enero en el 1,9%, sin cambios respecto al mes anterior, según el primer cálculo de la Oficina Europea de Estadística (Eurostat). Este dato tiene en cuenta por primera vez a Eslovenia, Estado miembro de la UE que se incorporó a la moneda única el pasado 1 de enero.

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