El Gobierno de Navarra ha editado, en colaboración con la Asociación Navarra de Alérgicos y Asmáticos (ANAYAS), el folleto «La alergia alimentaria y el comedor escolar», con el que pretende facilitar la incorporación de los niños con alergias alimentarias a los comedores escolares.
Este folleto recoge consejos e información práctica sobre la alergia alimentaria dirigida a padres, educadores y responsables de comedores escolares, para facilitar la resolución y la prevención de problemas relacionados con las reacciones a los alimentos.
En primer lugar, la publicación precisa que la decisión de enviar un niño alérgico al comedor escolar es competencia exclusiva de los padres o tutores, tarea en la que pueden ser asesorados por el médico que atiende el problema clínico del niño.
Una vez que se decide enviar al menor al comedor del colegio es recomendable, según el folleto, trasmitir la información de carácter médico de la forma más rigurosa posible a los responsables del mismo. La forma más adecuada, añade, es a través de un informe clínico en el que conste el diagnóstico y el tratamiento dietético que necesita el chaval.
Los padres pueden decidir que el niño se lleve los alimentos de casa o bien que reciba la comida que reparte el centro escolar. En ambos casos, el manual advierte de la necesidad de que se tomen precauciones. Algunas medidas pasan por tratar la comida de cada niño de forma individualizada y no incurrir en posibles accidentes de ingestión accidental.
Además, el folleto propone a los comedores escolares algunos grupos de dietas -teniendo en cuenta los alimentos que más alergias alimentarias provocan- tales como grupo «no frutas»; grupo «frutas salvo cítricos»; grupo «no huevo»; grupo «no lácteos»; «no huevo ni lácteos»; «no leguminosas»; «no leguminosas parcial» (pueden comer soja, guisantes, habas, judías verdes y cacahuetes); «no frutos secos» y grupo «no pescado ni marisco».
