Decorar la vivienda con plantas

Hay que elegir las especies que mejor se adapten a las condiciones ambientales de cada habitación o zona de la vivienda
Por EROSKI Consumer 14 de junio de 2006
Img plantascocina
Imagen: Allen Mowery

Las plantas destacan como elemento decorativo y ecológico, presente en la mayoría de las casas. Además, renuevan la calidad del aire, regulan la humedad y la temperatura ambiental, y tienen un efecto relajante. Con o sin flor, para acertar en la elección se debe tener en cuenta qué especies se adaptan mejor a las condiciones de luz, humedad y temperatura de cada estancia o zona de la vivienda.

Baños y cocinas, unas condiciones muy especiales

Para decorar un cuarto de baño con plantas, se debe tener en cuenta el alto grado de humedad, los cambios de temperatura y la escasa luminosidad (no siempre tienen ventanas) que a menudo hay en estas habitaciones.

Los humos, la elevada temperatura, las corrientes de aire y la humedad no son un buen ambiente para las plantas

Entre las plantas que mejor se adaptan a las condiciones especiales de esta zona de la casa destacan los helechos, los potos, la fitonia, la cheflera, la madreperla o la costilla de Adán. Todas ellas resisten bien la humedad. No obstante, su buen desarrollo depende de la luminosidad.

Tal y como ocurre con el cuarto de baño, la cocina no es el mejor lugar para una planta. Los humos, la elevada temperatura, las corrientes de aire y la humedad no conforman un ambiente adecuado para las especies vegetales. Las plantas que vayan a decorar esta estancia deben ser muy resistentes a condiciones tan adversas.

Lo más aconsejable en este caso es plantar hierbas que se puedan utilizar para cocinar: perejil, romero, menta o albahaca. Las macetas se colocan junto a la ventana, nunca delante de la misma, para evitar que las corrientes de aire las puedan dañar.

En ningún caso se deben colocar en una cocina plantas demasiado grandes que puedan suponer un estorbo, ni otras con componentes tóxicos que puedan pasar a los alimentos.

Algunas plantas tienen la capacidad de absorber los malos olores y purificar el aire. Estas propiedades hacen que ejemplares como la Draceana Marginata, planta nativa de islas Canarias, la Sansevieria Laurentii, los crisantemos o la Bilobata Hoya, una planta tropical procedente de Asia, sean también muy apropiadas para baños y cocinas.

Zonas de paso y salones

El recibidor y el pasillo son zonas con escasa iluminación y corrientes de aire, por lo que es necesario que las plantas que ocupen estos espacios sean resistentes. Es el caso de la aspidistra, o pilistra, y la sanseviera, también llamada lengua de tigre o espada de San Jorge. Ambas plantas soportan sin problema la atmósfera seca y caliente, así como la escasez de luz.

En salones con luz escasa, son muy apropiadas la fitonia y el tronco de Brasil

Respecto al salón, al ser una zona en general amplia y con buena iluminación, las opciones son más amplias.

Si es muy luminoso y soporta altas temperaturas, los cactus, en todas sus variedades, son una buena elección. Si se desea dar un toque más colorido a la decoración, las flores del hibisco y la buganvilla darán un punto de color a la estancia.

Para salones con luz escasa, son muy apropiados la fitonia y el tronco de Brasil. La azalea es otra planta que se cultiva muy bien en semisombra. Además, sus flores contribuyen a dar color al ambiente. Lo mismo que la violeta africana.

Plantas en el dormitorio, un dilema

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A menudo se cree que las plantas en el dormitorio son perjudiciales para la salud. Quienes defienden esta teoría se basan en la fotosíntesis, por la cual, durante las horas de luz, las plantas consumen dióxido de carbono y liberan oxígeno, mientras que por las noches este proceso se detiene y necesitan proveerse de él, como cualquier ser vivo.

Una teoría muy opuesta asegura que tener plantas en el dormitorio no sólo no es perjudicial, sino que es beneficioso. Para defender tal afirmación, se asegura que si bien durante la noche, al no recibir luz no hacen la fotosíntesis, por lo que consumen oxígeno, el balance global diario entre el consumido y el emitido es positivo, ya que se incrementa el nivel de oxigenación del habitáculo.

En todo caso, si se ponen en práctica ciertas precauciones, no hay ningún problema en compartir horas de sueño con plantas y flores. La mejor opción son las de menor tamaño y hojas pequeñas. Incluso, algunas especies crasas, como los cactus y otras suculentas (plantas capaces de resistir periodos de sequía al acumular agua en sus hojas, tallos y raíces) tienen la particularidad de que, durante la noche, abren sus estomas (poros) para intercambiar gases con el medio y evitar la pérdida de agua. A través de este mecanismo, liberan oxígeno también durante la noche.

No obstante, es preferible no llenar de plantas la habitación y, en todo caso, basta con dormir con la puerta o la ventana abierta para garantizar la ventilación del cuarto.

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