La mayoría de las veces el jardín no es tan grande como desearíamos y no se puede instalar un estanque. Sin embargo, sí podemos introducir elementos de agua para aportar vistosidad y sensación de frescor.
Para realizar una original fuente con la que alegrar el parterre se necesitará un viejo neumático, un depósito de agua moldeado con tapa que pueda introducir en el interior de la rueda, una bomba sumergible de bajo voltaje, una vasija de cerámica, guijarros de río y plantas con las que decorar el exterior de la fuente.
Antes de nada deberá elegir la ubicación final de la fuente porque una vez llena de agua y plantas le será muy difícil transportarla a su lugar definitivo. Asimismo ha de tener en cuenta que necesitará una toma eléctrica para hacer funcionar la bomba sumergible que hará brotar el agua.
Coloque el neumático sobre una capa de arena fina e introduzca la parte inferior del depósito de agua en el lugar destinado a la llanta. Si la bomba carece de pie colóquela sobre unas piedras en el fondo del depósito para lograr que el agua fluya por debajo de la bomba.
Pase el cable eléctrico a través del canal moldeado del depósito, llénelo de agua y tape el recipiente de manera que le tubo de la bomba salga por el centro y pueda fluir el agua. Ya tendrá la fuente lista, ahora habrá que colocar la vasija de cerámica y los guijarros sobre la tapa del depósito para mejorar la cara externa de la fuente y darle un aspecto de jardín acuático rodeándolo de plantas decorativas acuáticas como los nenúfares. Por último, tendrá que poner en marcha la bomba para disponer de la decorativa fuente.
