Ser el primer hijo de la familia es un honor y tiene ciertos privilegios mientras se es el único. Pero, cuando llega un nuevo bebé, el todavía niño pequeño cambia de categoría y pasa a convertirse en el “hermano mayor”, el responsable. En este artículo se explica el nuevo rol que adquieren los primogénitos con la llegada de un hermano, cómo en ocasiones se les exige una responsabilidad que no es apropiada para su edad y cuáles son las actitudes responsables que les corresponden en función de su madurez.