La Semana de la Ciencia 2007, que la ministra de Educación y Ciencia, Mercedes Cabrera, presenta hoy en Barcelona, ofrecerá dentro de su programación la oportunidad de conocer de cerca virus peligrosos, ver agujeros negros, descubrir las causas del cambio climático o participar en un taller de «CSI», entre otras actividades. Enmarcada en esta ocasión en las celebraciones del Año de la Ciencia, la Semana de la Ciencia se celebra entre el 5 y el 18 de noviembre en la mayoría de las comunidades autónomas, como la de Madrid, en la que está previsto que se desarrollen más de 500 actividades. Todas las universidades madrileñas, diversos ministerios y ayuntamientos, organismos públicos de investigación, museos, fundaciones, centros educativos y de educación ambiental, agencias espaciales y otras instituciones participan en el evento.
El organismo que más actividades oferta es el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), que abrirá sus puertas a muchos de sus centros, como el Museo Nacional de Ciencias Naturales, el Instituto del Frío o el Centro Nacional de Biotecnología. Los participantes también podrán visitar el centro de control del metro, el laboratorio de geodinámica y mareas terrestres del Valle de los Caídos (San Lorenzo de El Escorial), las instalaciones de la NASA en Robledo de Chavela y las de la Agencia Espacial Europea (ESA) en Villafranca del Castillo.
Los ingenieros mostrarán al público los primeros robots portátiles de asistencia personal, la importancia de la ciencia de los materiales en la Fórmula 1, explicarán la historia del cobre y abordarán la aplicación de las matemáticas en criminalística. Los participantes también tendrán la posibilidad de crearse un blog personal, ir a un taller matemático de pompas de jabón, ver una exposición de insectos en ámbar e incluso aprender trucos para conocer la edad de las personas fijándose en sus dientes.
