Las siete cámaras de comercio que operan en Galicia, y que crearon un grupo de trabajo técnico con el Consejo Superior de Cámaras para analizar la actual situación empresarial en la zona y conocer las medidas que cada sector propone, han hecho público un informe en el que se afirma que las pérdidas provocadas en el sector pesquero por el vertido del ‘Prestige’ ascenderán a 1.390 millones de euros.
Por ello, según se recoge en este estudio, los empresarios de la pesca y sus actividades derivadas, junto con el turismo y el comercio interior, advierten de que será necesaria más financiación a fondo perdido o con tipos de interés muy bajos para evitar que los proyectos en marcha en la zona no caigan a medio plazo y se vean obligados a realizar ajustes de empleo que se traducirán en despidos.
Aunque los sectores implicados hacen una valoración positiva de las ayudas directas recibidas a corto plazo, los pequeños empresarios gallegos, sobre todo en las zonas costeras afectadas, temen que el cese y la caída de la actividad no les permita hacer frente a los gastos corrientes de sus negocios a medio plazo, sobre todo si están inmersos en algún proyecto o inversión anterior. Es por ello que, «absolutamente todos los sectores», reclaman facilidades financieras «a bajo o nulo interés», o de lo contrario, «habría empresas abocadas al cierre o la regulación de empleo», señala el estudio.
Las expectativas del sector están «muy debilitadas», concluye el informe. La incertidumbre sobre una recuperación de las pesquerías y el mercado ha provocado «una política de contención por lo que pueda venir, con el consiguiente impacto negativo sobre las inversiones», explica.
La pesca ocupa en Galicia a más de 120.000 personas y alcanza el 10% de su Producto Interior Bruto (PIB). El 12,2% de los empleos gallegos dependen de la pesca de forma directa o indirecta, a los que se añadiría otro 12% del turismo, con 36.000 empresas dedicadas a ello, y una proporción similar para el comercio.
