El delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas presentó estos datos con motivo del Día Sin Alcohol, que se celebra el 15 de noviembre: si aplicamos el porcentaje (37%) al total de fallecidos en carretera durante 2002 obtenemos la cifra de casi dos mil muertes con el alcohol y el volante como fatal binomio. Otro dato importante es la proporción «muy alta» de accidentes con los jóvenes como protagonistas y en el fin de semana. Concretamente, 670 de los muertos con tasa positiva tenían entre 21 y 30 años, un 89 por ciento de ellos varones.
El mismo estudio detectó la presencia de otras drogas aunque en menor medida: cocaína en el 5,3 por ciento de los casos, cannabis en el 3,9, ansiolíticos 2,8, opiáceos 1,3, anfetaminas 0,5, éxtasis 0,4 y antidepresivos 0,3 por ciento. Los gastos a causa del alcohol suponen al estado más de 4.400 millones de euros al año. Una tercera parte es gasto directo en sanidad y el resto costes indirectos por absentismo laboral y pérdidas de productividad.
El estudio del Instituto de Toxicología revela además que el 40 por ciento de los peatones atropellados también se encontraban bajo los efectos del alcohol.