El Gobierno de Cantabria invertirá 143,4 millones de pesetas (algo más de 860.000 euros), en las obras de repintado de marcas viales de parte de la red autonómica de carreteras. Esta actuación afecta a 1.500 kilómetros de viales, el 71% de la red viaria de la región. Con esta actuación, que ya ha comenzado y que se llevará a cabo en dos meses, se inicia un plan de choque de la Dirección General de Carreteras, Vías y Obras tendente a conseguir un alto nivel de seguridad vial para la red viaria de carreteras cántabras, al corregir el apreciado desgaste de sus marcas viales en los tramos de más antigua construcción.
Los trabajos, que han sido adjudicados a tres empresas diferentes siguiendo criterios de calidad -tanto en los materiales como en la ejecución, así como la durabilidad- consistirán en el repintado del eje y de los bordes de las calzadas, utilizando pinturas de color blanco con microesferas de vidrio que proporcionan un mayor grado de retroflexión, y pinturas del tipo spray-plástic, convencional en frío.
El ancho de las marcas viales será de 10 centímetros en el eje, en todas las carreteras, mientras la anchura de las marcas viales en los bordes será de 10 ó de 15 centímetros, en función del que posean en la actualidad las distintas carreteras, de acuerdo con la normativa vigente. La importancia de la señalización horizontal es especialmente destacable en Cantabria al ser una región con frecuentes lluvias. La duración de las pinturas es menor que en zonas secas y la visibilidad e las señales en días lluviosos disminuye enormemente, por lo que por parte de los técnicos se recomienda realizar un mantenimiento constante con independencia de la pintura de los tramos de nueva construcción.
