Un proyecto de educación sanitaria confirma que las mujeres son eficaces agentes de salud

Su adecuada formación en este campo es la mejor garantía para conseguir una sociedad saludable
Por EROSKI Consumer 11 de noviembre de 2008

«Ángeles de la salud» es el nombre de un proyecto de prevención de enfermedades crónicas que ha puesto de manifiesto que las mujeres son eficaces agentes de salud. Esta iniciativa, iniciada por Novartis en 2007 en colaboración con la Asociación de Mujeres Turcas (AMT), revela que la adecuada formación sanitaria de la mujer es la mejor garantía para conseguir una sociedad saludable.

El proyecto llegó en su primer año a 4.000 madres y esposas de 26 ciudades de Turquía, la mayoría amas de casa de familias humildes y con limitado acceso a programas sanitarios. Todas ellas han recibido formación básica sobre hipertensión, diabetes y colesterol para que sepan prevenir esos riesgos y difundir el mensaje en su entorno. En 2008, la formación se ha extendido a otras patologías, como asma, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y vejiga hiperactiva, y a nueve ciudades más, mientras que el próximo año se incidirá en la detección precoz del cáncer de mama.

Los responsables del programa destacan que gracias a él el número de personas que nunca se ha tomado la tensión ha bajado un 47%, y el de quienes no conocen su cifra ideal de presión arterial ha descendido aún más, un 65%. También se ha reducido el desconocimiento sobre la diabetes (un 28%) y sobre el colesterol (un 16%).

«Las madres son el pilar de la familia para la salud», señala Sema Kendirci, presidenta de la AMT, que recuerda que Turquía ocupa el puesto 137 de la clasificación mundial de la equidad de género que elabora Social Watch. Las turcas «están discriminadas, pero su papel es clave para las futuras generaciones», apunta Kendirci, quien insiste en que «la educación para la salud es fundamental para conseguir un mejor futuro para todos».

Según los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y de la revista médica «The Lancet», el 80% de la mortalidad por enfermedades crónicas en 2005 tuvo lugar en 23 países de ingresos medios y bajos, entre ellos Turquía. Si no se hace nada, esa cifra subirá hasta 34 millones en 2030. La tarea preventiva femenina puede resultar clave para que este incremento nunca llegue a hacerse realidad.

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