Un real decreto permitirá indemnizar a 24 afectados por la talidomida, un medicamento que causó malformaciones a unas 3.000 personas

El fármaco, usado a finales de los cincuenta por mujeres embarazadas, se recetaba para paliar las náuseas durante los primeros meses
Por EROSKI Consumer 23 de marzo de 2010

Un total de 24 afectados en España por la talidomida, un medicamento que a finales de los años cincuenta causó graves malformaciones a unas 3.000 personas en nuestro país, recibirán una indemnización gracias a un real decreto que prepara el Gobierno. Las personas afectadas por este fármaco, recetado a mujeres embarazadas para paliar las náuseas, fueron víctimas de la focomelia, una anomalía congénita caracterizada por la carencia o excesiva cortedad de las extremidades. También se asocia la talidomida con la neuropatía periférica, una enfermedad que genera una debilidad muscular que en muchos casos llega a postergar a una persona en una silla de ruedas.

Para el reconocimiento de estas ayudas se requerirán exámenes médicos que se llevarán a cabo en el Instituto de Salud Carlos III, donde se recogerá además toda la historia clínica de estas personas y se valorará su índice de discapacidad. El Ministerio de Sanidad responde a la iniciativa aprobada en junio de 2009, por la que el Congreso instó al Ejecutivo a acordar con las asociaciones de víctimas posibles indemnizaciones así como determinados beneficios en materia de prestaciones.

Esta normativa, que se aprobará en «las próximas semanas», contemplará ayudas de entre 30.000 y 100.000 euros, en función del nivel de discapacidad de los afectados, indicó el presidente de la Asociación de Víctimas de la Talidomida (Avite), José Riquelme. El presidente de la asociación consideró «muy positiva» esta medida, como primer paso para que se reconozcan otras demandas como pensiones para los damnificados, al igual que ocurre en el resto de países de la Unión Europea (UE), unidades médicas de referencia que les atiendan y la cobertura total del coste de las prótesis. Riquelme señaló que estos primeros 24 afectados serán la «puerta de entrada» para que se reconozca la situación de todos los que viven bajo las «nefastas consecuencias» de un fármaco, que fue recetado a sus madres para paliar las náuseas durante los primeros meses del embarazo.

El presidente de Avite recordó que la talidomida fue un fármaco fabricado por la empresa alemana Chemie Grünenthal, que fue comercializado entre los años 1958 y 1961, aunque en España siguió a la venta de forma oficial hasta 1963. Consumido como sedante y calmante por mujeres embarazadas que padecían náuseas, sus efectos a medio plazo sobre el feto se desvelaron como catastróficos, ya que unos 20.000 niños nacieron con graves problemas congénitos en el medio centenar de países donde se vendió bajo unos 80 nombres comerciales.

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