El sector citrícola valenciano registra un deterioro progresivo por falta de innovación

La UPV advierte de que es uno de los sectores que menos apuestan por la I+D en toda la cadena agroalimentaria
Por EROSKI Consumer 5 de abril de 2011

El sector citrícola de la Comunidad Valenciana, pese a ser el que más peso tiene en la economía agraria de la región, experimenta un «deterioro progresivo» debido a que es uno de los que menos apuestan por la I+D en toda la cadena del complejo agroalimentario, según advierte un estudio de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV).

Los resultados del citado estudio revelan que la industria alimentaria es la que presenta mayor intensidad en innovación dentro del complejo agroalimentario, mientras que el menor dinamismo en I+D se encuentra en el sector primario y, fundamentalmente, el citrícola. Esta conclusión se extrae de un estudio sobre las fuentes de innovación en el sector agroalimentario realizado por el Grupo de Economía Internacional de la UPV en colaboración con la Fundación IVIFA.

Bajo la coordinación del catedrático de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica y del Medio Natural de la UPV José María García Álvarez-Coque, el informe destaca en especial la capacidad del sector de inducir innovación en la propia región, en comparación con el conjunto de la economía valenciana. «Desde este modo, el complejo agroalimentario resulta ser estratégico en la generación de innovación inducida en el propio territorio», apunta García Álvarez-Coque.

El trabajo también refleja que una comparación entre el sector de la industria de la alimentación y bebidas de esta comunidad y el de algunas economías desarrolladas sitúa a la valenciana en un nivel superior en intensidad de I+D al de otras economías mediterráneas, incluida la media española. «En términos generales, el esfuerzo innovador de la industria de alimentación y bebidas en la Comunidad Valenciana es superior al del resto de España y al de países como Italia, Grecia o Portugal, similar al observado en otros países como Irlanda e inferior a la situación registrada en los Países Bajos o en Francia, donde es casi dos veces mayor», añade García Álvarez-Coque. No obstante, los resultados no son tan alentadores para el sector primario, que incluye agricultura, ganadería, silvicultura y pesca, indica el comunicado de la UPV.

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