Investigadores españoles analizan el mapa genético del olivo para conseguir variedades más productivas

Pretenden además lograr aceites de mayor calidad o con características más beneficiosas para la salud
Por EROSKI Consumer 29 de enero de 2010

El proyecto de I+D+i Oleagen utiliza la genómica para descifrar el mapa genético del olivo con el fin de conseguir información clave para obtener variedades de olivar que garanticen explotaciones más productivas y rentables y aceites de mayor calidad o con características más beneficiosas para la salud, entre otras posibilidades. En esta iniciativa participan la Fundación Genoma España, el Instituto Andaluz de Formación Agraria y Pesquera (IFAPA) y la Corporación Tecnológica de Andalucía (CTA).

Los investigadores persiguen la generación de nuevas herramientas genómicas para el olivo y su aplicación en el análisis de la calidad del fruto y del aceite, así como sus caracteres agronómicos. Entre sus grandes objetivos destacan la generación del mapa genético y otras herramientas genómicas, que permitirán acelerar la obtención de nuevas variedades con mejores características agronómicas o de calidad del fruto y el aceite. También se pretende el desarrollo de una base de datos con recursos genómicos y agronómicos, asociada a una plataforma bioinformática, además de la identificación de genes relacionados con la calidad del fruto y del aceite, así como otros rasgos agronómicos de interés.

El proyecto Oleagen utiliza avanzadas técnicas de análisis de ADN para identificar los genes responsables de la acumulación de los aceites que forman parte de la aceituna, los denominados ácidos grasos, y del perfil cualitativo y cuantitativo de ácidos grasos, polifenoles (moléculas con un alto poder antioxidante) y compuestos volátiles (responsables del aroma) presentes en el aceite. El fin es llegar a saber con precisión qué genes influyen en la producción y calidad del aceite de oliva.

También estudian los genes relacionados con características productivas de interés agronómico, como el vigor y arquitectura de las plantas y su precocidad de entrada en producción. Estos caracteres son de gran interés para el sector olivarero en la actualidad debido a que las tendencias conducen a explotaciones intensivas, cada vez más densas, con árboles más pequeños y que necesiten el menor tiempo posible para entrar en producción.

Se espera que los resultados del proyecto permitan obtener el mapa genético del olivo y unas bases moleculares útiles (biomarcadores) para el desarrollo de nuevas variedades de olivo, que produzcan más cantidad de aceite que las actuales y con una amplia gama de calidades organolépticas y funcionales. Estas calidades estarían adaptadas a los gustos del consumidor (por ejemplo, en el sabor del aceite) y harían frente a algunos de los retos del sector olivarero (por ejemplo, características biosaludables del aceite o desarrollo de explotaciones intensivas).

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