Los recipientes de aceite de oliva utilizados para autoservicio de los clientes en los comedores y establecimientos públicos deberían estar «envasados y etiquetados», además de contar con un dispositivo que impida que se puedan rellenar, según una propuesta en la que trabaja el Gobierno y que fue remitida por los cuatro consejos reguladores de aceite de oliva de la provincia de Jaén.
Los consejos reguladores Sierra de Cazorla, Sierra de Segura, Sierra Mágina y Campiñas de Jaén señalaron que enviaron hace unos meses una propuesta conjunta en ese sentido al Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino (MARM), que ha respondido de forma «positiva». El Ministerio ha señalado que elabora en estos momentos un proyecto de reglamentación para los aceites vegetales comestibles en la que se recogerán algunas de las propuestas enviadas por parte de los consejos, indicaron.
El proyecto en el que trabaja el MARM considera que los envases de los aceites para autoservicio de los clientes en los comedores y establecimientos públicos, en particular en hostelería y restauración, se deben presentar «envasados y etiquetados». Además del cierre inviolable, estos envases deben estar provistos de un dispositivo que los haga irrellenables para garantizar la autenticidad del contenido, apunta el propia Ministerio.
El MARM indica además que para prohibir las aceiteras sin etiquetar en la restauración sería deseable la colaboración del sector hostelero, explicaron los consejos reguladores. En este sentido, los consejos anunciaron que van a realizar esfuerzos para sumar a esta iniciativa a los propios establecimientos hosteleros, «para quienes puede resultar positivo dar a conocer a sus clientes que el aceite que consumen es un producto de calidad».