El 65% de las personas (dos de cada tres) que llaman al Teléfono de la Esperanza necesitan que «alguien le escuche», mientras que un 17% pide orientación respecto a un problema y un 7% solicita una entrevista con un psicólogo o un abogado. El Teléfono de la Esperanza destaca estos datos con motivo del Día de la Escucha, que se celebrará el próximo 15 de noviembre. Este año, la conmemoración coincide con el 40 aniversario de este servicio, concebido para mejorar la salud emocional de las personas.
Durante sus 40 años de historia, los voluntarios del Teléfono de la Esperanza han atendido más de cuatro millones de llamadas de personas en situación de crisis emocional (más de 300.000 con temática suicida). El servicio resalta que la primera demanda que realizan aquellos que llaman es ser escuchado. «Porque, cuando una persona sufre una crisis emocional, solo con el hecho de desahogarse con alguien que le respeta y no le juzga, experimenta una gran liberación interior».
«La escucha activa es, en sí misma, terapéutica», recuerda el Teléfono de la Esperanza. Escuchar de forma activa requiere prestar atención a nuestro interlocutor, entender el mensaje que nos transmite y además captar los sentimientos que subyacen a lo que dice y, por último, comprender lo que el interlocutor demanda.
Profesionales de la salud mental sostienen que la carencia de una escucha profunda y de calidad en la infancia es el principal origen de muchos de los trastornos psicológicos y psiquiátricos que se manifiestan en la edad adulta, señala el Teléfono de la Esperanza. Por ello, en el Día de la Escucha se quiere sensibilizar a la sociedad sobre los efectos beneficiosos que para todos tiene saber escuchar bien a los demás.
