El Ministerio de Trabajo de la India ha hecho públicos unos datos que reflejan que durante 2006 fueron «rescatados» de sus ocupaciones y escolarizados más de 27.000 niños trabajadores en ese país asiático, donde el número de pequeños empleados en distintos trabajos supera los 12,6 millones, según el último censo oficial conocido. De esos 27.000 niños, unos 13.400 tenían entre cinco y ocho años, mientras que el resto comprendían edades de entre nueve y 13 años.
La legislación india vigente hasta el pasado mes de octubre limitaba el trabajo para los menores de 14 años únicamente en los oficios considerados «peligrosos», como la minería o la construcción. En el resto de empleos, los niños de cualquier edad podían trabajar, aunque sólo entre cuatro y seis horas al día, dependiendo de la tarea, y los empleadores estaban obligados a proporcionarles al menos dos horas de educación al día, algo que casi nunca sucedía.
Sin embargo, en octubre de 2006 entró en vigor en la India una ley que prohíbe emplear para tareas domésticas a pequeños menores de 14 años. La nueva norma también impide que los niños trabajen en las llamadas «dhabas» o kioskos de carretera, en hoteles, restaurantes, moteles, tiendas de venta de té, complejos turísticos y otros centros de ocio.