Regalar animales en Navidad

Diversas ONG diseñan campañas que animan a la meditación y reflexión antes de regalar un animal en estas fechas
Por EROSKI Consumer 4 de enero de 2007

Ecologistas en Acción de Navarra acaba de realizar un llamamiento para que los ciudadanos «reflexionen» antes de regalar animales como mascotas en las fechas de Navidad, «ya que un animal no puede considerarse un juguete, sino que es un ser vivo con necesidades, entre ellas la de ser atendido responsablemente».

Esta asociación ha explicado que este regalo «conlleva unas responsabilidades por parte de quien lo recibe a las que en muchas ocasiones no se suele responder» y añade que «en algunos casos no se regalan animales domésticos sino exóticos, de los que se desconocen en muchas ocasiones sus necesidades y su abandono tiene consecuencias imprevisibles». No hay que olvidar que a ley obliga a los dueños a mantenerlos en buenas condiciones sanitarias, prohibiendo su maltrato y abandono, y obliga al propietario -en el caso de los domésticos- a identificarlos, censarlos y contratar un seguro de responsabilidad civil en ciertos casos».

Por ello, la asociación señala que «antes de decidirse por regalar animales hay que pensar muy bien si el futuro dueño lo desea realmente

«Antes de decidirse por regalar animales hay que pensar muy bien si el futuro dueño lo desea realmente»
y, sobre todo, si su nivel de responsabilidad, el tiempo de que dispone para su cuidado y el entorno son los más adecuados». Y añade que «la equivocación en la decisión puede llevar consigo que el receptor del regalo termine por considerar al animal como una carga de la cual no sepa después cómo deshacerse».

En la mayoría de los casos, desgraciadamente, se termina abandonándolo quedando el animal sólo y desprotegido». Así, el animal se convierte, según la asociación, «en un ser errante que busca con dificultad dar respuesta a sus necesidades, convirtiéndose en un problema sanitario, ambiental y ético creado por nuestra propia inconsciencia».

No son juguetes

La Federación de Asociaciones Protectoras y de Defensa Animal de la Comunidad de Madrid también trabaja por evitar la adquisición impulsiva de animales en Navidad . Para ello, ha diseñado una campaña con la que pretende, bajo el lema ”En Navidad sé responsable, no son juguetes’, evitar la compra impulsiva de animales de compañía durante el periodo navideño y concienciar a la sociedad de la “responsabilidad que conlleva incorporar un animal a la familia”. Esta Federación, que integra a 10 protectoras madrileñas, desaconseja regalar animales en estas fechas, pero también en cualquier época del año, puesto que todas las personas que vayan a convivir con ellos deben estar previamente informadas y “participar en la elección del más adecuado para las costumbres de cada hogar, teniendo en cuenta factores como la actividad laboral, el tipo de vivienda o las actividades que se realizan en el tiempo libre”, asegura.

La FAPA recuerda que un animal es una responsabilidad que deberá prolongarse durante todos los años de su vida, y que incluye alimentación, aseo, atención veterinaria, identificación y tiempo para ser atendido.Un animal es una responsabilidad que deberá prolongarse durante todos los años de su vida, y que incluye alimentación, aseo, atención veterinaria, identificación y tiempo para ser atendido “Muchos de los animales que son comprados o regalados en Navidad terminan en la calle, muriendo hambre y frío, o atropellados, cuando esa situación se podría evitar perfectamente”, lamenta la presidenta de la Federación, Matilde Cubillo.

Por su parte, la vicepresidenta de la Federación, Pilar del Cañizo, incide en que “la Navidad no es el momento más apropiado de incorporar un animal al grupo familiar porque es un cambio importante en las costumbres y en el día a día de la familia, que en esta época de tanto bullicio no le presta la atención que sobre todo necesita en los primeros días”. Por ello esta organización insiste en que se medite la decisión de llevar un animal al núcleo familiar y recomienda la adopción frente a la compra, puesto que en las asociaciones protectoras y perreras municipales hay cientos de animales esperando una segunda oportunidad, y con la adopción de cualquiera de ellos se salvarán dos vidas: la del animal que se adopta y la del que ocupará su lugar en el centro.

Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube