Los jóvenes españoles necesitan 40 años y el 60% de su sueldo para comprar una vivienda, según un estudio

Los pisos son un 10% más onerosos para las mujeres, porque los sueldos que perciben son más bajos
Por EROSKI Consumer 30 de diciembre de 2003

Un estudio realizado por la Federación de Usuarios y Consumidores Independientes (FUCI), presentado ayer en Madrid, revela que los jóvenes españoles necesitan 40 años y el 60% de su sueldo para comprar una vivienda. Este informe, titulado «Análisis sobre la necesidad social de vivienda en sectores específicos de la población», recoge datos del censo de población, de la situación sociolaboral de los jóvenes, los inmigrantes y los discapacitados, y del precio medio de la vivienda, entre otras variables.

Según este trabajo, las tasas de emancipación más altas se producen en Baleares y Cataluña por tener salarios más altos, y en Valencia y Extremadura, por el asequible precio de la vivienda. Por contra, en Madrid y en el País Vasco, las buenas condiciones laborales no consiguen contrarrestar los elevados precios de la vivienda, así como en Cantabria, Asturias y Galicia, donde el problema es la difícil situación laboral, dado el moderado precio de las casas. Asimismo, FUCI indica que los pisos son un 10% más caros para las mujeres, ya que éstas perciben sueldos más bajos (2.000 euros al año menos de promedio) que los hombres.

Durante la presentación del estudio, Agustina Laguna, presidenta de la Federación, explicó que el parque global de viviendas ha aumentado más que el número de hogares, y esto, además de indicar «un aumento de las segundas residencias» en España, desvela que «sectores económicamente fuertes compran vivienda para invertir, y eso encarece el mercado».

En opinión de Laguna, en nuestro país son necesarias 438.176 viviendas a un precio asequible para los jóvenes, los inmigrantes también jóvenes y las personas con discapacidad, y el número de viviendas para estos sectores debería «aproximarse a la mitad de las que se promuevan como protegidas».

FUCI propone además la rehabilitación de los cascos históricos de las ciudades, donde se debería permitir la construcción de una altura más para aumentar el parque de viviendas sin necesidad de buscar más suelo, y programas de pisos municipales en alquiler subvencionado para jóvenes.