El permiso de paternidad será de cuatro semanas a partir de 2011

Se trata de 13 días más que los que ahora concede la Ley de Igualdad
Por EROSKI Consumer 28 de mayo de 2009

A partir del 1 de enero de 2011 el permiso de paternidad remunerado pasará a ser de 28 días, según un principio de acuerdo alcanzado ayer en el Congreso de los Diputados. Son 13 días más que los que ahora concede la Ley de Igualdad, aprobada en 2007.

En España, ocho de cada diez padres cogieron el año pasado esos 13 días libres para ayudar a la madre en las fechas posteriores al parto, pero sólo un porcentaje mínimo disfrutó, además, de parte del permiso de maternidad cedido por su mujer, que es la otra opción que tienen los padres.

De todos modos, las cuatro semanas a las que los hombres podrán acogerse dentro de poco más de año y medio están por detrás de las 12 de las que disfrutan los padres islandeses, las diez de Suecia y las seis de Noruega, los tres países más avanzados en políticas de conciliación familiar.

Sin embargo, España se colocará por delante de Bélgica, Dinamarca, Francia, Gran Bretaña, Holanda y Portugal, donde los gobiernos otorgan de dos a 15 días y, en algunos casos, compensados económicamente no más de un 80%.

La historia de los permisos de paternidad en España es corta. En el Plan Concilia (2005), destinado a funcionarios, se incorporó una baja de diez días. El resto de los españoles tenía que conformarse con los dos días recogidos en el Estatuto General de los Trabajadores. Dos años después, la Ley de Igualdad fijó su duración en 15 días.

La norma no excluía la posibilidad de que los convenios colectivos de las empresas ampliaran este periodo, si bien en el caso de los empleados de la Administración establecía que no podían acumular ambos permisos.

400 euros y

El Gobierno no tiene previsto, al menos de momento, eliminar la deducción de los 400 euros en el IRPF y el “cheque bebé” de 2.500 euros, ha asegurado hoy la vicepresidenta económica, Elena Salgado, quien no obstante ha precisado que ambas medidas están siendo evaluadas.

Según Salgado, los 400 euros han supuesto una inyección económica para las familias y, sobre su continuidad, ha insistido en que se valorarán todos los factores cuando llegue el momento. “Estamos revisando todo nuestro esquema de ingresos fiscales y lo que está suponiendo el descenso de la recaudación y lo que está suponiendo en términos de ingresos el aplazamiento de las deudas tributarias”, ha precisado.

Respecto a la posibilidad de subir el IRPF a las rentas más altas, como piden los sindicatos, Salgado cree que tendría un efecto recaudatorio “muy bajo”. La configuración actual del IRPF “tiene ya una progresividad importante”, por lo que considera que esta medida no es prioritaria.

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