Igual que podemos ver en tres dimensiones, también vivimos en un mundo de sonidos tridimensional. Inconscientemente percibimos las diminutas fracciones de segundo con las que un sonido llega antes al oído derecho o al izquierdo (diferencia de fase o retraso de tiempo interauricular) y su intensidad (diferencia de intensidad interauricular). Imitar esa percepción e incluso mejorarla es la obsesión de los sistemas de audio envolvente, cada vez más presentes en nuestros hogares.
Tres tipos de sonido
‘Surround’ en el hogar
Los sistemas de sonido envolvente nacieron para la pantalla grande y allí evolucionaron y se perfeccionaron. No por nada a las versiones domésticas que tan populares son hoy día se les conoce como sistemas de cine en casa (Home Theater). Su gran reto es operar correctamente en pequeñas habitaciones repletas de objetos que alteran la trayectoria del sonido.
No obstante, no suele haber problemas de compatibilidad: los sistemas Dolby Digital suelen reconocer las películas codificadas en DTS, que a su vez también están codificadas en algún sistema Dolby. Además, la mayoría de los reproductores de DVD están preparados para vérselas con múltiples formatos de sonido surround.
También existe la opción de simular sonido envolvente únicamente con un par de altavoces, como Virtual Dolby Surround, Virtual Dolby Digital y Dolby Virtual Speaker (también aplicable a computadoras).
ENLACES
- Dolby: www.dolby.com
- DTS:
www.dts.com- THX:
www.thx.com- EAX:
www.eax.creative.com- Sensaura:
www.sensaura.com- Audio SpotLight:
www.holosonics.com- ISVR:
www.isvr.soton.ac.uk
El primer experimento de sonido envolvente tuvo lugar en 1941, de la mano del clásico de Disney ‘Fantasía’. El ingeniero de sonido William Garity grabó cada sección de la orquesta por separado y la mezcló en cuatro pistas distintas de audio dentro de un rollo independiente que se reproducía desde distintos puntos de la sala. A esta técnica se la bautizó como Fantasound, pero no arraigó por su elevado coste.