Tiendas de música online: ¿un modelo con futuro?

Al calor del éxito de la tienda de iTunes, están apareciendo diversas iniciativas que pretenden trasladar el negocio de la venta de canciones a la Red, aunque sin aportar ninguna novedad a lo ya existente
Por Jordi Sabaté 7 de junio de 2006

Mientras la venta de Cd’s cae a un ritmo del 3% anual, el negocio de la compra de canciones en Internet se ha triplicado durante 2005. Y ello a pesar de que paralelamente crece la alternativa gratuita: el intercambio de música en las redes P2P. Una buena parte de la culpa de este fenómeno lo tiene la ‘iTunes Music Store’ de Apple. Este servicio se estrenó en abril del 2003 y en julio de 2005 celebró la venta de su canción número 500 millones. Ahora, algunas de las grandes empresas de la Red quieren probar suerte y se han decidido por desarrollar sistemas similares.

Una tienda para un reproductor

Una tienda para un reproductor

Tras el éxito de El Koala y los chicos de ‘Amo a Laura…’, el penúltimo ‘hit’ en cuanto a vídeos musicales en Internet procede de los Estados Unidos. No se trata de un tema con aroma agrícola ni de una parodia de grupo ñoño diseñada por una agencia de publicidad; su autor, apodado MC Lars, desgrana en clave de rap un discurso serio y amenazante para la industria discográfica: “Hey Mr. Record Man / Tu sistema no puede competir / Es el Nuevo Modelo de Artista / Transferencia de fichero completada /¡Descarga esta canción!”

El vídeode MC Lars ya se puede ver en YouTube y la canción, ‘Download this song’ (‘Descarga esta canción’) se puede bajar desde la página del rapero en MySpace. La corrosiva letra también está traducidaal castellano y no tiene desperdicio. Viene a explicar, en definitiva, algo que muchos usuarios piensan: no se puede ir contra el futuro, contra lo que tiene éxito, en este caso la compartición digital de música.

Sin embargo, la experiencia de Apple en este campo demuestra que sí se puede hacer un cierto negocio vendiendo música en la Red, aunque sea de forma muy peculiar. Su tienda online, ‘iTunes Music Store‘, acapara el 75% de las descargas de pago y se ha establecido como modelo de lo que muchos expertos piensan es la única salida para la supervivencia de la industria musical: la alianza entre un reproductor multimedia y las empresas discográficas.

Apple no vende música

El usuario se conecta directamente a la tienda de ‘iTunes’ desde el reproductor del mismo nombre, que debe haber instalado previamente en su escritorio, y puede acceder a la compra completa de discos, o bien a la compra de canciones sueltas a un precio de 0,99 dólares la canción. Estas mismas canciones que vende iTunes se pueden encontrar en las redes P2P, y sin embargo cientos de miles de usuarios han preferido pagar por ellas. ¿Por qué?

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Para entender la clave del éxito de esta tienda hay que tener en cuenta previamente algo que no todo el mundo sabe: Apple no gana un sólo euro con la venta de canciones. El beneficio de la compañía no está en la venta de música, sino en la de hardware, concretamente de su reproductor iPod.

Lo que pretende Apple es que aquellos usuarios que posean un iPod tengan un sitio oficial donde adquirir su música a precio ajustado y con cierta garantía de calidad y seguridad frente a los peligros (más o menos reales) que puedan acechar en las redes P2P: software maligno para el ordenador, ficheros que tardan en descargarse, que tienen mal sonido o son difíciles de encontrar…

Las canciones compradas en la tienda de iTunes sólo se pueden escuchar en un reproductor iPod, quedando el resto de aparatos incapacitados para ello por causa del sistema anticopia

Por otro lado, las canciones compradas en la tienda de iTunes sólo se pueden escuchar en un reproductor iPod, quedando el resto de aparatos incapacitados para ello por causa del sistema anticopia (DRM) de iTunes. Así, quien quiera escucharlas en un reproductor portátil debe comparse un iPod. Tampoco se pueden grabar en un Cd más de un número determinado de copias, y no se pueden poner en las redes P2P para compartirlas con otros usuarios.

A pesar de esto, la tienda iTunes ha resultado ser una excelente estrategia para aumentar la venta de reproductores de música, ya que ha dotado al iPod de su complemento ideal: un lugar muy especial para un producto igual de especial y con un precio elevado. De paso, Apple ha conseguido demostrar a la industria del ocio que se puede vender música en Internet.

Pixbox, la apuesta de Terra

El ejemplo de iTunes parece haber animado a empresas como Microsoft, RealNetworks (propietaria del software reproductor multimedia Real), o en España Terra a imitar el ejemplo y lanzar al mercado sus propios sistemas de venta de canciones online.

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Terra se ha reinventado como sitio web transformándose en Pixbox, un portal que ofrece contenidos de ocio para comprar y también para compartir con otros usuarios que estén inscritos al servicio. Por 9,99 euros mensuales, el usuario podrá descargarse todas las canciones que desee, de un catálogo de un millón, con derecho a copiarlas en tres ordenadores diferentes, grabarlas hasta en tres Cd’s y escucharlas en tres reproductores. Además, si comparte la música con otros usuarios del servicio, puede obtener rebajas en su suscribción. Por otro lado, se pueden comprar canciones puntualmente, con un precio que va desde 0’75 euros por una canción de catálogo a 1,15 euros por una novedad.

Para comprar entre el millón de canciones que asegura tener el catálogo de Pixbox, hay que descargarse previamente un programa reproductor al escritorio del ordenador. Igual que sucede con iTunes, el reproductor de Pixbox es el único capaz de reprocucir las canciones descargadas desde el portal. Además, al ejecutar el reproductor, éste se instala como predeterminado y maneja por defecto todos los ficheros de audio que haya en el disco duro.

Al leer las condiciones de uso del servicio, en ningún punto se especifica que la posesión de los archivos comprados sea indefinida

¿Compra o alquiler?

Sin embargo, al leer las condiciones de uso del servicio, en ningún punto se especifica que la posesión de los archivos comprados sea indefinida, sino más bien limitada al tiempo de suscrpción o, en el caso de compras puntuales, a un periodo de tiempo determinado. “…dentro del Servicio existen, por una parte, determinados Contenidos cuya facturación será por consumo -de manera que el Cliente disponga de un periodo de tiempo determinado para realizar el visionado/audición de dicho contenido una vez efectuada su compra…”, puede leerse.

RealMusic: melodías para el móvil

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RealNetworks acaba de aterrizar en España con RealMusic, un servicio en el que se vincula al reproductor RealPlayer con un catálogo musical que mezcla las canciones más populares internacionalmente con otras del ámbito nacional, e incluso asegura apostar por artistas desconocidos. RealPlayer se había visto en el último año desplazado del mercado por el auge de iTunes, las prácticas monopolísticas de Windows Media Player y el intento fracasado de RealNetworks de establecerlo como reproductor de pago.

La intención, según Gabirel Levy, director de Música de RealNetworks en Europa, es crear un espacio propicio para el lanzamiento y la promoción de futuras promesas. Esta estrategia se conoce como ‘marketplace’ y recientmente ha ofrecido resultados tan notables como los Artic Monkeys o el nuevo Mc Lars, ambos procedentes del ámbito de MySpace.

RealMusic no vende canciones, sino melodías para el móvil

Sin embargo, RealMusic no vende canciones, sino melodías para el móvil: el servicio consiste en una suscribción mensual de 11,99 euros para escuchar diversas radios (algunas tan conocidas como Virgin Radio o Radio 3), ver vídeoclips y acceder a un servicio de melodías para móviles (estas últimas, en realidad descargables bajo una suscribción mensual de 4,99 euros). Para acceder a RealMusic es imprescindible descargarse el RealPlayer 10.5

Napster, la que fuera la más popular red P2P a finales de los noventa, ha regresado con un servicio similar. Aunque sus propietarios lo anuncian como ‘música gratuita’, en realidad sólo contempla escuchas en ‘streaming’ durante un periodo de prueba antes de comprar una canción a 0,99 dólares, o bien suscribirse al servicio permanente por 10 dólares al mes. Las pérdidas de Napster durante abril de 2005 y abril de 2006 aumentaron un 86,1%, hasta alcanzar los 43 millones de euros.

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Windows Media Player 11: Microsoft + MTV

El servicio creado en alianza entre el nuevo Windows Media Player 11 de Microsoft y el catálogo URGEde la cadena musical MTV, tiene características parecidas al portal Pixbox de Terra. De nuevo se trata de un programa reproductor multimedia que lleva incorporada una tienda de música, en este caso con dos millones de canciones. Por 9,95 dólares al mes, el usuario puede descargarse tantas canciones como quiera, pero sin la posibilidad de pasarlas a su reproductor portátil. Para poder hacerlo, la cuota mensual es de 14,95 euros.

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El uso del sistema implica, por descontado, la descarga del nuevo reproductor de Microsoft, y si el usuario deja de pagar la cuota las canciones desaparecen de su disco duro. Además, a diferencia del caso de Pixbox, con URGE sólo son compatibles determinados reproductores portátiles (iRiver, Zen , Samsung…) entre los que no está el iPod. El servicio tampoco ofrece ningún tipo de información gráfica o de texto sobre las canciones que el usuario se descarga.

Respecto al número de copias posibles de cada canción, el URGE permite conservar la canción en cinco ordenadores diferentes y hasta siete copias en Cd. Por descontado, el nuevo Windows Media Player sólo funciona en el sistema operativo Windows, y la tienda online no está disponible en versiones anteriores del reproductor. También se pueden comprar canciones sueltas a 0,99 dólares.

Los analistas han acusado a Microsoft de lanzar un servicio poco eficiente y sin ningún valor añadido

Mala acogida

El sistema no ha tenido buena aceptación entre los analistas del sector, que han acusado a Microsoft de lanzar un servicio poco eficiente y sin ningún valor añadido sobre lo que ya viene ofreciendo iTunes. Rob Pegoraro, experto en tecnología del Wasington Post destroza en su columna tanto a URGE como a Microsoft, acusándolos, entre otras cosas, de ignorar musicalmente a grupos importantes, de ofrecer programaciones de radio aburridas y basar el servicio más en poner trabas al crecimiento de iTunes, aprovechando el tamaño de Microsoft, que en servir al usuario.

A este respecto, el lanzamiento del servicio podría estar vinculado a la resolución del Tribunal Europeo de la Competencia, que el año pasado multó a Microsoft por prácticas monopolísticas y le obligó a ofrecer el reproductor Windows Media Player separado de su sistema operativo (éste suele llegar al usuario ya instalado en los ordenadores que compra). En otras palabras, del mismo modo que iTunes busca incrementar las ventas del iPod, el nuevo servicio de Microsoft y MTV podría estar orientado a posicionar el Media Player frente al auge de iTunes.

Los expertos, enemigos del DRM

En terminos generales, los expertos no auguran futuro a estas iniciativas por varios motivos. El primero es que resulta difícil competir con algo tan barato como una red P2P. Incluso iTunes se considera más un fenómeno vinculado a la marca (ceñida a su vez a usuarios con poder adquisitivo) que al precio de las canciones. De hecho, las descargas de pago contabilizadas son una gota de agua en el mar de los archivos de audio que se comparten anualmente en las redes P2P.

Ricardo Galli califica al DRM como un último intento por parte de la industria discográfica de aislarse de la realidad del mundo tras fracasar en su intención de ilegalizar las redes P2P

Otro motivo es la presencia de los sistemas anticopia, los DRM, muy criticados por los analistas. Ricardo Galli, editor de Menéame, se hacía eco en su blog de una comparaciónaparecida en Slashdot, en la que se identificaba al DRM como un último intento por parte de la industria discográfica de aislarse de la realidad del mundo tras fracasar en su intención de ilegalizar las redes P2P.

Por su parte Enrique Dans, profesor de Sistemas y Tecnologías de Información del Instituto de Empresa, asegura refiriéndose al DRM: “En mi iPod conviven canciones de iTunes, otras ripeadas [copiadas] de mis CDs, y otras bajadas de diversas plataformas P2P, y las primeras son, con mucho, las que más problemas me dan”.

Dans añade en referencia al DRM de URGE: “Me produce verdadera claustrofobia pensar en sistemas de este tipo. Me ocurre igualmente con Apple cuando compro música: la idea de ‘esto por lo que he pagado y que he pasado a mi iPod ya no puedo sacarlo de él, es como un pequeño espía que está pendiente de si lo copio en un ordenador o en un CD, y limita mis derechos mucho más de lo que lo haría una canción bajada de una plataforma P2P’ me pone muy nervioso”.

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