Los sistemas de identificación para mascotas, además de obligatorios, son claves para no perder al perro o gato este verano. El microchip, que ronda los 30 euros y es del tamaño de un grano de arroz, facilita que nuestro peludo compañero vuelva a casa en caso de extravío. En este artículo se explica cómo son los sistemas de identificación para mascotas, cuándo es obligatorio el microchip, qué hacer si perdemos al can o felino este verano y de qué manera chapas y collares ayudan a que nuestro peludo amigo no se extravíe.
Sistemas de identificación para mascotas: no perder al perro este verano
Los sistemas de identificación para perros y gatos nos ayudan a no perder a la mascota este veranoLa identificación del perro es obligatoria en España. El microchip es un minúsculo dispositivo electrónico que, a pesar de su reducido tamaño (similar a un grano de arroz), contiene información relevante que impide perder al can: los datos del propietario y la forma de contacto. Tiene un coste aproximado de unos 30 euros y se implanta bajo la piel del cuello de la mascota. De este modo, si el can se pierde, los veterinarios y policías pueden leer los datos de contacto y teléfono del dueño con un sencillo aparato, similar al que utilizan las tiendas para leer los códigos de barras.
Su eficacia contra los abandonos y extravíos de animales explica que el anteproyecto de la nueva ley de protección de perros y gatos que prepara el Gobierno recoja su obligatoriedad, incluso cuando se trata de una adopción.
Identificar al gato: clave para no perderse
El anteproyecto de la nueva ley de protección de perros y gatos sí obliga que todos los felinos adoptados tengan microchip.
Pero, ¿qué pasa hasta que esta norma se apruebe, un trámite que carece de fecha fija? Por el momento, son las comunidades autónomas las que obligan a sus gatos a estar identificados a través del microchip. Mientras que el microchip para el gato es obligatorio en Andalucía, Cantabria, Madrid, Cataluña y Galicia, no lo es todavía en el resto del territorio.
Algunas ciudades, sin embargo, también han extendido el sistema de identificación para felinos por su cuenta. Es el caso de San Sebastián, que ha impuesto el microchip obligatorio para los gatos de la urbe que salgan a la calle. El incumplimiento de estas normas acarrea sanciones que oscilan entre los 300 y los 2.000 euros, en función de si la infracción se considera leve o grave.
Y, ¿qué ocurre si se viaja con el felino fuera de España? Entonces, las cosas cambian: el gato viajero internacional sí debe tener implantado el microchip. El registro de mascotas europeas identificadas con microchip, Europetnet, acumula los datos del felino. De este modo, si el animal se pierde en cualquier país de la Unión Europea, se puede seguir su pista, localizar su paradero y conseguir que vuelva a casa.
¿Qué hacer si pierdo al perro o gato este verano?
El primer paso es denunciar la pérdida de la mascota en la comisaría de la policía local más cercana. Pero, además, en caso de que se viaje este verano con el perro o gato y este se extravíe, hay que avisar en la comunidad autónoma donde vive el animal. «Muchas personas ignoran que hay que notificar la pérdida de la mascota en la base de datos de la comunidad autónoma donde está registrado el microchip, para que quede constancia y se agilice el trámite de búsqueda del dueño», explica la veterinaria Leire Jiménez, de la Sociedad Española de Animales y Plantas.
Cada región tiene su propio registro de mascotas identificadas. El teléfono de la base de datos figura en la tarjeta que entrega el veterinario tras colocar el microchip al animal. Además, si los nervios traicionan, se puede contactar con el veterinario habitual a fin de que facilite el teléfono de contacto del registro.
Las precauciones para no perder al perro o gato este verano no tienen por qué acabar ahí. Las chapas identificativas de metal para canes y felinos se cuelgan del collar o arnés del animal y resultan muy útiles para no perder al peludo amigo. El precio de estos sistemas de identificación en los que hay que grabar en la chapa el nombre de la mascota y un teléfono móvil, rondan los 10 euros. De esta manera, si alguien se cruza con nuestro compañero de cuatro patas, podrá llamarnos y ayudarnos a que vuelva a casa, sano y salvo.
