Récord de personas desplazadas: una familia más cada minuto

Los conflictos han incrementado la cifra de desplazados internos, que en 2013 superaron los 33 millones de personas frente a los 28,5 millones de 2012
Por Azucena García 30 de mayo de 2014
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Imagen: IDMC

En todo el mundo hay 33,3 millones de personas que viven en medio de conflictos y violencia. Cada minuto, una familia huye de su hogar y busca refugio dentro de su propio país. Siria, República Centroafricana y República Democrática del Congo son los tres lugares donde más desplazamientos de estas características se registraron el año pasado. Pero no los únicos. Un total de 60 regiones completan un informe exhaustivo sobre los civiles más afectados por conflictos, enfrentamientos o catástrofes naturales, entre otras causas. En este artículo se repasa su situación.

Récord de personas desplazadas

Cada vez hay más desplazamientos y, por lo tanto, más personas desplazadas. La cifra asombra: los conflictos actuales en el mundo provocan que haya 33,3 millones de personas desplazadas en su propio país. Un triste récord. Siria, República Centroafricana y República Democrática del Congo se llevan la peor parte. Representan el 67% de los 8,2 millones de nuevos desplazados contabilizados en 2013. Junto con ellos, destacan también Colombia y Nigeria. Estos cinco países aportan el 63% de todos los desplazados internos.

Siria, República Centroafricana, RDC, Colombia y Nigeria aportan el 63% de los desplazados internos

Los datos se recogen en el último informe del Observatorio de Desplazamiento Interno (IDMC), miembro del Consejo Noruego para Refugiados (NRC), que ha advertido del nivel más alto de desplazados internos por segundo año consecutivo. En 2013 hubo 4,5 millones más de personas que se vieron obligadas a huir de sus hogares y resguardarse en refugios ubicados dentro de su propio país. Se estima que cada día 9.500 personas más pasan por esta situación: una familia cada 60 segundos.

El informe confirma «una preocupante tendencia al alza de los desplazamientos internos», ha alertado el secretario general del NRC, Jan Egeland. El aumento de casos en el último año ha sido «drástico», pero sobre todo preocupa la prolongación de esta situación: los desplazados internos viven en ella un promedio de 17 años.

Los cinco países con más desplazados internos

La coyuntura en el último año se ha complicado para miles de personas, en especial, en lugares donde los conflictos se han recrudecido. Lejos de avanzar hacia una situación de paz, en determinados países se ha progresado hacia un agravamiento de los enfrentamientos, lo que ha aumentado el número de desplazados internos. Durante la presentación del informe, el Alto Comisionado de ACNUR, António Guterres, abogó por la protección «inmediata» y la asistencia a las personas desplazadas internas como «un imperativo humanitario».

El informe incluye datos de 60 países y territorios aquejados por conflictos por tierras y recursos, desplazamientos en masa debidos a actos de violencia o enfrentamientos que obligan a los habitantes a huir del fuego cruzado. Entre ellos, estos son los cinco conflictos que han provocado un mayor número de desplazados internos:

  • Siria: 6,5 millones. Este país acoge el 43% de nuevas personas desplazadas en todo el mundo, es decir, casi la mitad de quienes han huido de sus casas se encuentran desplazados en Siria. Es la crisis de desplazamiento interno «más grande del mundo», afirma Jan Egeland, no solo por el volumen de personas, sino porque grupos armados controlan los alrededores de los campos de desplazados internos, que han sufrido ataques, carecen de servicios de saneamiento y suministro de ayuda suficiente.

  • Colombia: 5,7 millones. El aumento de personas desplazadas en este país ha sido constante en la última década. El conflicto dentro de sus fronteras y nuevas formas de violencia son la causa de que decenas de miles de personas nuevas huyan cada año de sus casas. La falta de un alto el fuego afecta sobre todo a quienes viven en zonas rurales.

  • Nigeria: 3,3 millones. Es el tercer país monitoreado con mayor número de desplazados internos. Sin embargo, Nigeria se incluye por primera vez en este informe. Hasta ahora, el Gobierno no había facilitado datos. En el último año, medio millón de personas han engrosado la lista de desplazados internos debido a un incremento de los ataques del grupo Boko Haram, que mantiene secuestradas a varios centenares de niñas.

  • República Democrática del Congo: 2,9 millones. Los disturbios y la violencia son constantes en el país desde mediados de la década de los noventa, tal como recuerda el director del IDMC, Alfredo Zamudio. Sin embargo, en 2013, todavía hasta un millón de personas más abandonaron sus hogares. Los enfrentamientos por el control de la tierra y los recursos naturales han causado numerosos choques violentos que han derivado, en algunos casos, en conflictos intercomunales.

  • Sudán: 2,4 millones. Solo el año pasado hubo 470.000 nuevos desplazados. La región de Darfur y los estados de Kordofán Meridional, Kordofán Septentrional y Nilo Azul registraron los peores datos. Los enfrentamientos armados han dejado hasta ahora 2,4 millones de desplazados internos.

Junto con estos conflictos, preocupa también la situación en República Centroafricana. «El golpe de Estado perpetrado por la coalición Séléka desplazó a alrededor de 935.000 personas durante el transcurso del año», detalla el informe. Con más de 12,5 millones de desplazados internos en 21 países, el África subsahariana es la región con el mayor número de desplazamientos. En Asia, los desplazados internos se concentran en Pakistán, Myanmar, Afganistán, India, Filipinas, Indonesia y Sri Lanka.

Cómo se recopilan los datos

Es la parte más difícil. Para la elaboración de este informe, gobiernos, ONG y agencias de la ONU proporcionan los datos con que cuentan acerca del número de personas desplazadas, pero la recopilación no es sencilla. Por temor, algunas personas permanecen en lugares aislados o de difícil acceso, otras se han reasentado en distintos puntos o no se han registrado en ningún lugar tras huir de sus casas. Uno de los principales retos es atender a estas personas, que a menudo se refugian en viviendas precarias de donde pueden ser desalojadas, en asentamientos improvisados sin ningún tipo de atención o en entornos urbanos en los que se enfrentan a problemas importantes de marginación.

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