Advierten de que la proliferación de webs de salud puede estimular la «medicina defensiva»

Esta práctica consiste en la prescripción por parte del médico sólo para defenderse de futuras denuncias
Por EROSKI Consumer 13 de marzo de 2003

La creciente proliferación de sitios web sobre salud puede suponer un aumento de los litigios contra los facultativos y estimular una mayor práctica de la llamada «medicina defensiva», que consiste en la prescripción por parte del médico de tratamientos y exploraciones con el único fin de protegerse de futuras denuncias. Así lo pone de manifiesto el IV Informe de la Sociedad Española de Informática de la Salud (SEIS), titulado «Luces y sombras de la información de salud en Internet», presentado ayer en Madrid.

Según este trabajo, el aumento de la litigiosidad se basa en que «muchos pacientes que no irían a una biblioteca, sí acuden a buscar información de salud en Internet, lo que les puede dar una falsa seguridad y conducirles a decisiones equivocadas e incluso peligrosas».

El informe apunta que la información sanitaria que aparece en la Red presenta una «gran variabilidad», por lo que en muchas ocasiones se requiere «un elevado nivel de formación para comprenderla». Asimismo, indica que existe «información de salud de mala calidad, sesgada, inadecuada, inexacta, no actualizada e inoportuna». «Todo ello ha llevado a situaciones de peligro e incluso a fraudes», agrega.

Otros riesgos que presenta la información sanitaria en Internet, según la SEIS, son provocar un temor en los pacientes «a que las nuevas tecnologías puedan sustituir las consultas y la atención presencial», y que se puedan crear «nuevas inequidades por la desigualdad en el acceso a las tecnologías».

A pesar de todo, el informe reconoce que la cada vez mayor presencia de webs de salud en la Red tiene también ventajas. Así, destaca que la mayor accesibilidad a la información permitirá que se potencie el papel activo de los pacientes en la toma de decisiones. «Esta situación se verá favorecida porque los pacientes son cada vez más críticos y se informarán más, es de suponer que también mejor, para tomar esas decisiones», asegura.

Los autores subrayan además que la información sanitaria «online» puede complementar la facilitada por los profesionales sanitarios y a su vez puede enriquecerse con la obtenida por los canales convencionales. También hacen hincapié en las posibilidades del correo electrónico para convertirse en «un instrumento eficaz para estrechar las relaciones con los profesionales».

Desde el punto de vista del facultativo, la SEIS cree que la Red permite «un trabajo corporativo más fácil, compartiendo la información clínica de los pacientes, con formación y acceso al conocimiento más accesibles y una mayor seguridad en las transacciones».

Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube