Además de las brocas clásicas helicoidales, con forma de espiral y una punta en el extremo, en ocasiones, ciertos trabajos requieren brocas especiales. Su diseño y apariencia son muy diferentes a los modelos convencionales. No obstante, la premisa por la que se rigen es la misma: el material que se va a perforar determina la selección de la broca.
Perforaciones de gran diámetro
Para taladrar orificios de gran diámetro, es posible hacerlo mediante aproximaciones sucesivas con un accesorio helicoidal. Si el diámetro ha de ser de 12 mm, se debe comenzar con un taladrado previo de 6 mm. Sin embargo, hay otras alternativas. Una de ellas es emplear una broca de corona. Estas sierras están compuestas por diversas hojas metálicas dentadas dispuestas de manera circular y concéntrica. Tienen una broca central que las guía y perforan al girar.
Las brocas de coronas están compuestas por diversas hojas metálicas colocadas de manera concéntrica
Con estas brocas, se realizan círculos pasantes de gran tamaño en yeso, hormigón y PVC. También hay sierras de corona específicas para perforar cerámica. Su apariencia es similar, pero en este caso las coronas no son dentadas. En el borde de corte tienen unas aristas elaboradas con un material de gran dureza que permite taladrar la cerámica de forma limpia y precisa.
En madera
Para realizar perforaciones de grandes dimensiones en madera es preciso emplear brocas de pala, también denominadas barrenas planas. Es aconsejable utilizarlas con un taladro eléctrico, a una velocidad de rotación entre 100 y 500 vueltas por minuto. En el extremo cortante tienen dos filos inclinados y una punta recortada. Cuando la broca de pala se introduce en la madera dibuja un cono, similar a un cráter, que guía la barrena y evita el desvío del eje de perforación.
Las brocas «forstner» o brocas cilíndricas también son apropiadas para trabajar la madera. Ambas permiten realizar agujeros ciegos con un diámetro de entre 10 y 50 mm. Disponen de una cabeza cortadora plana y cilíndrica, equipada con dos cuchillas, dos filos esféricos y una punta centradora.
No siempre es imprescindible utilizar un taladro mecánico para realizar orificios de gran tamaño en la madera
Sin embargo, no siempre es imprescindible utilizar un taladro mecánico para realizar orificios de gran tamaño en la madera. Las barrenas salomónicas de canal ancho se acoplan a un berbiquí de mano y se emplean también para hacer agujeros precisos y calibrados. La punta de este accesorio tiene forma de tornillo perforador que facilita la entrada de la broca sin grandes esfuerzos manuales. El cuerpo de la barrena es una espiral que expulsa las virutas y mantiene limpio el agujero.
Trabajar con seguridad
Para trabajar con un taladro, con independencia del tipo de broca que se emplee y la superficie que se perfore, se deben respetar unas normas de seguridad:
Sujetar con firmeza la pieza que se va a taladrar.
Seleccionar el accesorio adecuado en función del material y del trabajo que se realice. No es recomendable emplear brocas específicas para madera, o cualquier otra superficie, sobre hormigón o yeso. Es probable que el accesorio se dañe y que el trabajo fracase.
Emplear los medios de protección personal necesarios. En especial si se taladra metal o cristal. Son imprescindibles las gafas protectoras, los cascos para protegerse del ruido y la mascarilla.
Se debe adecuar la velocidad del taladro según la dureza del material y la broca elegida. En general, los accesorios de grandes dimensiones y las superficies gruesas requieren trabajar a un ritmo más lento.
Cuando sea necesario cambiar el accesorio, es fundamental apagar el taladro y desconectar el cable de alimentación de la red.
Una vez terminado el trabajo, se recomienda limpiar de forma adecuada la herramienta y los accesorios para evitar la aparición de óxido.
