Un agujero en la madera suele provocar astillas, sobre todo cuando ese agujero atraviesa por completo una tabla. Estas astillas suelen ser incómodas para el que trabaja la madera, y existe alguna posibilidad de evitar su aparición.
Lo primero que se debe hacer si no se quiere que el agujero provoque astillas será utilizar una broca bien afilada. De esta manera se consigue que la madera sea perforada con mayor limpieza y genere menos astillas. También hay que tener en cuenta la velocidad al taladrar. Si no se hace a la velocidad adecuada también se provoca astillas.
Otra opción será taladrar a dos tiempos. Consiste en taladrar primero desde el lado aparente, y cuando la broca esté a punto de salir por la otra parte, pasar a taladrar por ese lado. La última opción es colocar una madera debajo de la que se vaya a taladrar. De esta manera el taladro seguirá taladrando la segunda madera y no provocará esas astillas.
