La pérdida de poder adquisitivo de los jubilados se acelerará a partir de 2014

Entre 2007 y 2011, la pensión media del Sistema de la Seguridad Social se incrementó en menor proporción de lo que le hubiera correspondido, en relación al IPC y a la variación de los salarios
Por EROSKI Consumer 10 de mayo de 2012

La congelación de las pensiones aprobada en 2011 provocó ese año una pérdida de poder adquisitivo de los pensionistas de 1,2 puntos porcentuales y acelerará la merma de poder adquisitivo en las pensiones contributivas, excluidas las mínimas, a partir de enero de 2014, según asegura un informe presentado por el Gobierno la Comisión del Pacto de Toledo, en el que se analiza la revalorización de las pensiones en el periodo comprendido entre 2007 y 2011 y su relación con la variación de precios al consumo (IPC).

El documento señala que en los años 2009 y 2010 hubo un aumento de gasto de 1.354,03 y 1.320,81 millones de euros, respectivamente, y a partir de 2011 el gasto se redujo en 915,34 millones de euros por la pérdida neta de 1,2 puntos de poder adquisitivo. El ahorro neto por menor revalorización será de 881,26 millones de euros en 2012, de 848,45 millones de euros en 2013 y de 816,86 millones de euros en 2014. Si se efectúa una compensación entre lo percibido de más entre 2009 y 2010 y lo dejado de percibir desde enero de 2011, «la pérdida real comenzará a partir del año 2014, cuando la suma de las cuantías perdidas superará a lo percibido de más», indicó el Ejecutivo.

En el periodo analizado, la pensión media del sistema de la Seguridad Social «se incrementó en menor proporción de lo que le hubiera correspondido, en relación al IPC y a la variación de los salarios, como consecuencia de la no revalorización de las pensiones aprobada por el Gobierno en 2011», dijo el actual Ejecutivo. Las pensiones que ganaron más poder adquisitivo fueron las mínimas, el SOVI y las no contributivas, en la medida en que son las que no se vieron afectadas por la congelación.

El Gobierno destacó que España es uno de los pocos países de la Unión Europea donde la revalorización automática de las pensiones en la misma proporción que la variación del IPC está garantizada por ley, lo que tiene una incidencia considerable en el coste total de la nómina de pensiones. Una décima de revalorización de las contributivas en 2012 tendría un coste presupuestario anual de 93,83 millones de euros y comprometería un valor actual de 1.205,61 millones de euros.

En la actualidad, el 26,86% del importe de la nómina de pensiones corresponde a las revalorizaciones acumuladas y el 7,04% a la garantía del mínimo. Los incrementos de gasto por complementos a mínimos fueron superiores a los aumentos de la aportación del Estado para su financiación. Incluso en 2011 se redujo esa aportación estatal en 200 millones de euros en relación con los 300 millones de euros de incremento que se producía con anterioridad.

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