El mar Cantábrico, al sur del Golfo de Vizcaya, es famoso por la calidad de sus anchoas. Sin embargo, la pesquería cerró entre 2005 y 2010 debido al colapso de su caladero. Aprendida la lección y mejorados los métodos de gestión, consiguió cinco años después la certificación de Marine Stewardship Council, la organización sin ánimo de lucro que combate la sobrepesca a nivel mundial.
Qué es una anchoa
La anchoa es una especie pelágica de pequeño tamaño, de ciclo vital corto, perteneciente al orden Clupeiforme, familia Engraulidae, género Engraulis.
Las principales especies del género Engraulis que se pescan en los diferentes océanos son las siguientes:
- anchoveta de Perú (E. ringens)
- anchoa argentina, en las costas de Argentina, Uruguay y sur de Brasil (E. anchoita)
- anchoa japonesa (E .japonicus)
- la anchoa europea (E. encrasicolus)
- la de Australia y Nueva Zelanda (E. australis)
- la anchoa de África austral (E. capensis)
La anchoa Engraulis encrasicolus, que se captura en nuestra costa, se encuentra en todo el Atlántico nororiental y suroriental, mar Mediterráneo y mar Negro. Se pesca en los meses cálidos con redes de cerco, lo que permite que el pescado llegue al consumidor muy fresco y con sus propiedades sensoriales y nutricionales intactas.
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Bondades de la anchoa que se captura en España
La anchoa que se captura en España es la Engraulis encrasicolus, conocida por otras denominaciones autorizadas: bocarte (Asturias, Cantabria y Galicia), aladroc (Valencia y Baleares), longorón (Canarias), seitó (Cataluña y Valencia), antxoa o bokarte (País Vasco) y boquerón, denominación común en otras comunidades autónomas.
Esta especie, que se comercializa habitualmente entera y fresca, era muy conocida y apreciada en la antigüedad por griegos y romanos que la consumían de diversas formas (cruda, frita o en salazón). También se usaba para preparar el garum, una salsa muy valorada en Roma, que servía de aderezo en otros platos de pescado. En la Edad Media ya se encontraba en las mejores mesas de la Provenza y el País Vasco.
En España, la anchoa en semiconserva es un producto muy apreciado, y algunos puertos pesqueros han hecho de su preparación su especialidad. Así han cobrado fama las anchoas de La Escala (Gerona) y de Santoña (Cantabria), cuya actividad conservera surgió a finales del siglo XIX introducida por artesanos italianos.
La anchoa es una especie de alto interés comercial no solo para el abastecimiento humano sino como carnada en otras pesquerías. Como otras especies de pescado, desempeña un papel importante en la dieta, especialmente en algunos países cuya alimentación básica es baja en proteínas.
Por otro lado, se caracteriza por su versatilidad, debido al valor añadido proporcionado por su sistema de conservación. Asimismo, además de ser un producto de consumo con valor nutricional, la anchoa puede ser considerada un producto de consumo de lujo.
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Cómo se pesca la anchoa del Cantábrico
La pesca de anchoa en el mar Cantábrico se lleva a cabo mediante redes de cerco, una técnica adecuada para aquellas especies que se mueven en bancos. La mayoría del pescado se captura entre marzo y junio.
Tras el colapso de la pesquería en 2005, y tras cinco años de cierre, la cofradía de pescadores de San Martín de Laredo —la más antigua de España— y las Federaciones de Cofradías del País Vasco iniciaron el proceso de certificación bajo el Estándar de Pesquerías de MSC, el más riguroso del mundo, basado en ciencia.
El Estándar de MSC se utiliza para determinar si una pesquería está siendo bien gestionada y es sostenible, puesto que en él se reflejan los conocimientos más actuales e internacionalmente aceptados en el campo de la ciencia y de la gestión de pesquerías. Asimismo, este estándar se revisa y actualiza periódicamente y en colaboración con distintos científicos y representantes de la industria pesquera y de asociaciones conservacionistas.
20.000 toneladas de pesca sostenible
Cuando comenzaron, en 2010, eran 50 barcos de Vizcaya, Guipúzcoa y Laredo, mientras que hoy en día suman un total de 139 barcos y la adhesión de las flotas de Asturias, Cantabria y Galicia. Todo ello supone un total de más de 20.000 toneladas de pesca sostenible.
La flota integrada en estas cofradías tomó la decisión de someterse de forma conjunta a la evaluación completa del Estándar de MSC. Lo hizo con la finalidad de poner en valor la sostenibilidad de su forma de pescar, desarrollada históricamente, que asegura una calidad de la anchoa diferenciada y contrastada convirtiendo a este pescado en un producto único en el mercado que hace que sea importante que el consumidor final tanto nacional como europeo la pueda distinguir al adquirirla.
La certificación de la anchoa del Cantábrico es todo un caso de éxito de buenas prácticas pesqueras. Las organizaciones de productores de bajura de Guipúzcoa (OPEGUI) y de Vizcaya (OPESCAYA) que integran a la flota de cerco de anchoa de las Cofradías Vascas y la Cofradía de Pescadores de San Martín de Laredo consiguieron el reconocimiento de la certificación de pesca sostenible MSC en 2015, gracias a su buen hacer y compromiso con la sostenibilidad de los mares y océanos y con el pescado.
Esta pesquería ha seguido trabajando de la mano de MSC y el pasado 2020 se recertificó con MSC. En marzo de 2022, 48 barcos gallegos de la Asociación de Armadores de Cerco de Galicia (ACERGA) se unieron a la certificación MSC de la anchoa del Cantábrico.
