La mitad de las gafas de sol a la venta en España no protegen contra la radiación ultravioleta

Recomiendan la adquisición de modelos homologados y garantizados, que cumplan con las normas de calidad sobre protección ocular
Por EROSKI Consumer 4 de julio de 2010

Más de la mitad de las gafas de sol que se venden en España «no superan los controles sanitarios y no proporcionan una suficiente barrera contra la radiación ultravioleta», según ha advertido el Colegio de Ópticos y Optometristas de la Región de Murcia. Con el objetivo de prevenir daños oculares, el organismo colegiado ha aconsejado la protección frente a los rayos UV y el uso de gafas de sol homologadas y garantizadas, que cumplan con las normas de calidad óptica imprescindibles para la correcta protección ocular.

Las gafas de sol se han convertido «en un objeto indispensable para el día a día, sobre todo en verano». De ahí «la importancia del uso de gafas de sol cuya finalidad, más allá del elemento estético, sirva para proteger los ojos de las radiaciones ultravioletas, disminuir la probabilidad de deslumbramiento y amortiguar la luminosidad solar», apuntaron desde el Colegio. Las exposiciones solares sin protección, unidas al cloro de las piscinas y el agua del mar, «favorecen la aparición de afecciones como la conjuntivitis, las cataratas o las queratitis», advirtieron. Estas patologías, junto con las infecciones oculares típicas, se incrementan en torno a un 20% durante la época estival, detalló el Colegio.

El presidente de esta entidad, José Miguel Pelegrín, destacó que resultan especialmente vulnerables los ojos de los niños, ya que su cristalino es transparente, de modo que deja pasar toda la radiación solar. Por ello, la exposición solar sin protección visual puede llegar a provocar lesiones en la córnea, la retina y el cristalino, indicó.

Pelegrín recomendó que la «mala costumbre» de comprar gafas de sol en mercadillos, puestos ambulantes y establecimientos no autorizados «debe terminar por el bien de nuestros ojos», ya que son productos «que no han pasado ningún control de calidad, ni óptico ni sanitario, por lo que su uso puede perjudicar la visión y provocar afecciones oculares». Las lentes solares «deben absorber totalmente la radiación ultravioleta, la más perjudicial para los ojos, y reducir la luz hasta un nivel confortable», por lo que la elección de las gafas debe realizarse en función del grado de exposición que se vaya a experimentar, aconsejó.

Las gafas deben cumplir el estándar europeo que representa la marca «CE» sobre gafas de sol (EN 1836:1997), ya que algunas incluyen este sello sin aportar los otros datos obligatorios. Pelegrín también instó a exigir que las gafas de sol «tenga especificado el número de categoría de filtro, que indica el factor de absorción que va de cero a cuatro en función de su capacidad de absorción a la luz», y advirtió de que las lentes que no cumplen los certificados de calidad dejan pasar la radiación solar, independientemente de que sean oscuras. Es recomendable también que las lentes, además de tener filtros para la radiación ultravioleta y ser de calidad, tengan la mayor protección lateral posible, apuntó.

Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube