Las mujeres podrán contar en breve con tres nuevos métodos anticonceptivos, como son el implante subcutáneo, el anillo vaginal y los parches anticonceptivos, mientras que los hombres deberán esperar a un plazo entre dos y tres años para disponer de una píldora anticonceptiva eficaz.
Así se puso ayer de manifiesto en el sexto Congreso de la Sociedad Española de Contracepción, en el que cerca de setecientos especialistas en ginecología abordarán, desde ayer y hasta el próximo viernes, los mecanismo de acción de los métodos anticonceptivos, las actitudes sexuales en la adolescencia o la salud reproductiva de la mujer, entre otros temas.
El ginecólogo Rafael Sánchez Borrego, de la Clínica Diatros de Gavá (Barcelona), que participa en el Congreso con la ponencia «La revolución anticonceptiva está en marcha», explicó que hasta el momento la píldora anticonceptiva «sigue siendo líder en cuanto a utilización», pero existen grupos de mujeres que, por diversos motivos, no pueden utilizarla.
Para estas mujeres, de momento, existen nuevos métodos hormonales como el Dispositivo Intrauterino (DIU), que libera hormonas dentro del útero y que tiene efectos beneficiosos, ya que puede reducir a la mitad el riesgo de que a una mujer se le practique una histerectomía.
«Pienso que la revolución de la anticoncepción está aún pendiente», puntualizó Rafael Sánchez Borrego, quien avanzó que «en muy poco tiempo» aparecerán nuevos sistemas de liberación hormonal como el parche anticonceptivo, los implantes subcutáneos y el anillo vaginal.
Los tres métodos se encuentran actualmente en fase de ensayo en humanos y previa al período de comercialización. Según explicó el ginecólogo, los parches anticonceptivos y los anillos vaginales liberan los componentes que se usan en la píldora, los estrógenos (que controlan el ciclo menstrual) y los gestágenos (que aseguran la eficacia anticonceptiva), mientras que el implante subcutáneo sólo libera los gestágenos.
