La Consellería de Sanidad de la Xunta de Galicia deberá pagar un total de 60.000 euros al viudo e hijas de una mujer que falleció después de que se le hubiese diagnosticado como benigno un tumor que tenía carácter maligno, según una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Galicia.
La mujer, de 46 años de edad, ingresó de urgencia en 1998 en el Hospital Arquitecto Marcide de Ferrol, donde se le diagnosticó una apendicitis aguda de la que fue operada ese mismo día, según se recoge en el fallo. Tras la operación, los facultativos cometieron un «error de diagnóstico», ya que se detectó una masa que, aunque en ese momento fue considerada un tumor benigno, en 2003 fue revisada por el jefe de servicio del centro, quien determinó que se trataba de un tumor maligno que requería ser tratado como tal.
La sentencia afirma que, de haberse producido el diagnóstico adecuado, debía haberse realizado a la paciente una laparotomía exploradora, ya que «pese a ser posible que en ese caso se hubiera desarrollado la carcinomatosis peritoneal, tal posibilidad hubiera sido más reducida». Fue precisamente una carcinomatosis peritoneal la que acabó con la vida de la paciente en noviembre de 2003.
También el Consello Consultivo, cuyo parecer se incluye en la resolución, considera que en este caso no se logró el «umbral mínimo estandarizado» de funcionamiento del servicio sanitario porque «no se evaluó correctamente» la gravedad del proceso que padecía la mujer y «no se apuraron» las posibilidades de utilización de medios terapéuticos.
El Tribunal Superior de Justicia de Galicia falló el pasado 25 de octubre la estimación parcial de la reclamación presentada por el viudo e hijas de la fallecida. Así, la sentencia fija la indemnización en 60.000 euros, en lugar de los 180.304 euros que reclamaba la familia.
