Según un estudio del Servicio de Ginecología del Hospital Santiago Apóstol de Vitoria, en la actualidad hay unas 800.000 mujeres españolas en edad fértil que se exponen al riesgo de un embarazo no deseado «por no utilizar métodos anticonceptivos o hacerlo mal».
Más concretamente, el informe señala que el 28 por ciento de las españolas de entre 15 y 49 años declaró el año pasado no utilizar ningún método anticonceptivo. Los datos se compensan con el aumento de las tasas de interrupción voluntaria de embarazo (IVE) que se sitúa en 7 de cada 1.000 mujeres.
Por edades, en 2001 la tasa más alta de mujeres que interrumpieron su embarazo fue entre mujeres de 20-24 años con un 12,86 por 1.000, seguido del grupo de 25-29 años (9,34) y del colectivo de las adolescentes (8,29). En este sentido, en torno al 37 por ciento de las mujeres de hasta los 24 años que se quedan embarazadas finaliza su gestación con un aborto voluntario.
Por otro lado, el estudio muestra el cambio que ha sufrido la población española en cuanto a la anticoncepción, ya que en el año 1985 tan sólo el 33 por ciento de las mujeres utilizaba algún método anticonceptivo, mientras que el porcentaje se ha incrementado hasta el 72 por ciento en 2003. Además, se estima que entre el 15 y 20 por ciento de las parejas españolas tienen problemas para lograr una gestación y que muchas no pueden acceder a los tratamientos de reproducción asistida, ya que, de los 203 centros autorizados para realizar estas prácticas en España, únicamente el 18 por ciento pertenece a la red pública del Sistema Nacional de Salud (SNS).
Por último, los expertos consideran que las autoridades sanitarias deberían mejorar la accesibilidad a los métodos anticonceptivos, dispensar gratuitamente la anticoncepción de emergencia e introducir, con carácter obligatorio, la educación sexual en los programas escolares.