Las adopciones internacionales descendieron el año pasado en España. En total se adoptaron 5.423 niños y niñas procedentes de 35 países, un 2,17% menos que el año anterior, según datos presentados ayer por la secretaria de Estado de Servicios Sociales, Familias y Discapacidad, Amparo Valcarce. Pese a este descenso, nuestro país sigue teniendo la tasa de adopciones más alta del mundo (12,3 por cada 100.000 habitantes) y Valcarce espera que esta tendencia se mantenga estable a lo largo de los próximos años.
China sigue siendo el principal país de origen de los niños adoptados por los españoles, con 2.753 expedientes en 2005 (un 15,2% más). A continuación se sitúa la Federación Rusa (1.262 menores), seguido de Ucrania (394), Colombia (240) y Etiopía (227). Otros países de origen fueron Bolivia (89), Perú (66), India (43), Kazajistán (43) y Nepal (43). El perfil mayoritario de los adoptados es el de una niña menor de dos años.
El 88,6% de los pequeños fueron adoptados por parejas y el 11,4% por personas en solitario. Al respecto, Valcarce informó de que en 2006 ya se han registrado los primeros casos de parejas homosexuales que han iniciado los trámites de adopción.
Tras la aprobación de los matrimonios del mismo sexo, España ha explicado a los distintos países los cambios legislativos y trabaja en los aspectos técnicos para facilitar apoyo a estas parejas que desean adoptar «en igualdad de condiciones» que el resto de los ciudadanos.
Unificar criterios
Más allá de esta cuestión, uno de los principales objetivos del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales en el ámbito de las adopciones es reducir el tiempo de duración del trámite que, actualmente, en función del país, se sitúa entre los 6 y los 24 meses.
El departamento que dirige Jesús Caldera trabaja además con las comunidades autónomas para unificar los protocolos mediante los cuales se acredita la idoneidad de las parejas, el procedimiento de adopción y el seguimiento de los hijos, para reducir la actual tasa de rechazo (1% de los casos).