Greenpeace afirma que las videoconsolas están fabricadas con sustancias y materiales peligrosos

Entre estos componentes se encuentran los ftalatos, prohibidos en los juguetes y artículos para niños que se venden en la UE
Por EROSKI Consumer 21 de mayo de 2008

Las principales videoconsolas tienen entre sus componentes sustancias y materiales peligrosos para la salud y le medio ambiente como PVC (policloruro de vinilo), ftalatos, berilio y bromo, según concluye un informe presentado por la organización ecologista Greenpeace.

Aunque con algunas diferencias en el contenido de sustancias o materiales peligrosos, ninguno de los tres fabricantes -Sony, Nintendo y Microsoft- ha superado el examen de Greenpeace. Tanto en la Xbox 360 de Microsoft como en la PS3 de Sony, algunos materiales contenían niveles muy altos de ftalatos, que no están permitidos en los componentes de juguetes y artículos para niños que se venden en la UE.

Uno de estos ftalatos es el DEHP, que interfiere en el desarrollo sexual de los mamíferos. El otro ftalato, el DiNP que se ha encontrado solamente en la Xbox 360, también está prohibido en juguetes y artículos infantiles, indica el informe.

Tanto en la Xbox 360 de Microsoft como en la PS3 de Sony, algunos materiales contenían niveles muy altos de ftalatos

«Depende de que las videoconsolas se consideren juguetes o no, para que puedan contener legalmente sustancias peligrosas y materiales que pongan en riesgo nuestra salud. Sin embargo, ya existe tecnología disponible para que las empresas diseñen y fabriquen videoconsolas sin utilizar compuestos tóxicos», declaró Kevin Brigden, miembro de la Unidad Científica de Greenpeace y participante en el estudio.

Altos niveles de bromo

Todas las videoconsolas presentan varias sustancias peligrosas, asegura la organización ecologista. Por ejemplo, se han descubierto altos niveles de bromo en componentes de los tres aparatos analizados. Las mayores concentraciones en peso pertenecían a piezas de la PS3 y la Wii, con un 13,8% y un 12,5% respectivamente.

Los análisis ponen de manifiesto que los fabricantes han reducido o evitado el uso de determinadas sustancias en algunos materiales

Como dato positivo, los análisis ponen de manifiesto que los fabricantes han reducido o evitado el uso de determinadas sustancias en algunos materiales. En la Wii de Nintendo, no se han encontrado aleaciones de berilio en los contactos eléctricos, mientras que el uso de PVC y ftalatos es limitado. Por otro lado, la PS3 contiene algunos ejemplos de circuitos impresos sin bromo, y la Xbox 360 utiliza menos sustancias bromadas en los materiales de las carcasas.

Para Sara del Río, responsable de la Campaña de Contaminación de Greenpeace, «estos análisis demuestran que es posible fabricar videoconsolas más respetuosas con el medio ambiente. Las empresas que las producen sólo tienen que revisar qué componentes peligrosos pueden ser sustituidos por alternativas no tóxicas y asumir el compromiso de hacerlo».

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