Un aumento del IVA de los peajes del 7% al 16%, que el Gobierno tendrá que aprobar en los próximos meses por mandato del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (UE), obligaría a los conductores a pagar un mínimo de 16.500 millones de pesetas más al año por el uso de las autopistas españolas.
No obstante, la cifra adicional que tendrán que pagar los usuarios, si finalmente el incremento del IVA lo tiene que asumir totalmente el consumidor, será posiblemente superior a los 16.500 millones indicados, ya que esta cantidad estimativa refleja sólo lo que habría supuesto en dinero el aumento del impuesto (del 7% actual al 16%) sobre las cifras de actividad de las concesionarias de autopistas españolas correspondientes al 2000.
Los ingresos que las empresas concesionarias lograrán este año serán probablemente superiores a los del ejercicio pasado, pues aumentarán los kilómetros de autopistas en servicio, se prevé un incremento de intensidad media diaria de utilización, y porque el precio de los peajes ha subido más de un 2% de media. El momento y la forma en la que el Gobierno va a aprobar el nuevo tipo del IVA de los peajes aún no ha sido determinado por el Ministerio de Hacienda, que todavía estudia la sentencia del Tribunal Europeo y las distintas fórmulas para cumplirla.
Los ingresos de las empresas concesionarias de autopistas españolas mejoraron durante el año pasado en un 6,2%, hasta alcanzar un total de 196.458 millones de pesetas, pese a que el Ministerio de Fomento les obligó, por sorpresa y en contra de lo pactado, a congelar las tarifas de los peajes. Dado que los precios no han variado con respecto a 1999 y que tampoco se pusieron en servicio nuevos kilómetros de autopista, la mejora de los ingresos en el 2000 se ha debido a un importante aumento de la cifra de usuarios. En concreto, la intensidad media diaria de conductores en las autopistas aumentó un 10,4%, con 20.987 usuarios en todas las vías (17.665 vehículos ligeros y 3.322 pesados).
