Para que un cuadro de pintura adquiera el aspecto de una antigua obra de arte podemos optar por intentar que la pintura de la impresión de estar resquebrajada. Para ello aplicaremos un barniz al cuadro con la idea de que parezca envejecido.
Antes de que se seque completamente el barniz lo cubriremos con un barniz para desquebrajar. Ahora es cuando tendremos que elegir si queremos que el cuadro dé la apariencia de tener unas grietas finas o gruesas. Para obtenerlas finas daremos una fina capa de barniz para envejecer y varias capas finas para resquebrajar y después secaremos todo el conjunto con un secador. Si por el contrario queremos unas grietas gruesas aplicaremos una capa espesa de barniz para resquebrajar sobre una capa gruesa de barniz para envejecer sin que termine de secar.
