El embargo de Rusia a los productos cárnicos de Andalucía y Extremadura como medida de precaución contra la enfermedad animal de la «lengua azul» es «inaceptable». Así lo ha dicho hoy la directora general de Ganadería del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, María Echevarría, quien considera que la medida adoptada por las autoridades rusas «va más allá de lo establecido por la Unión Europea (UE) y la Oficina Internacional de Epizootias (OIE)».
Según Echevarría, a la luz de la evolución de la enfermedad, tanto la UE como la OIE no consideran necesario establecer restricciones al comercio de carne y productos elaborados de dichas zonas.
La Comisión Europea tratará de aclarar a lo largo de hoy si el embargo afecta también a la carne y a los productos terminados o se trata «de una mala traducción» de las recomendaciones de la OIE.
En este sentido, la directora de Ganadería ha recordado que la orden ministerial publicada el pasado sábado establece las condiciones de movimiento en todo el territorio español, impidiendo que salgan de las zonas circundantes a los focos de la enfermedad tanto animales vivos como material biológico, embriones, óvulos y esperma, pero permite el comercio de carne.
«Confío en que cuando Rusia habla de materias primas y productos acabados sea una mala traducción de lo que dice la OIE, la decisión comunitaria y nuestra orden ministerial: material patológico y productos biológicos que se envían a laboratorios y centros de investigación, pero no productos de mercado», ha señalado.
En cualquier caso, el comercio de carne entre Rusia y Andalucía y Extremadura «es nulo», porque sus importaciones proceden principalmente de Cataluña y Madrid, zonas libres de la «lengua azul».
