La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) inició ayer un control exhaustivo de todas las cisternas de leche procedentes de Francia y Portugal «para evitar que lleguen a su destino: las industrias lácteas españolas». Esta acción forma parte de una serie de movilizaciones contra la actitud de la industria láctea que concluirá en una manifestación frente a la sede del Ministerio de Agricultura en Madrid el próximo 11 de julio.
El responsable de este sector en COAG, Gaspar Anabitarte, denunció ayer que la industria láctea española importa 500.000 litros de leche concentrada al día desde Francia y Portugal a un precio más bajo, a la vez que dejan de recoger la leche de los ganaderos españoles con el único objetivo de desestabilizar el sector.
Anabitarte señaló que COAG mantendrá contactos con los productores de Francia y Portugal para conocer la situación real de la producción en estos países. Este portavoz señaló que la industria española «ha utilizado y manipulado» a la Interprofesional Láctea (Inlac), por lo que este foro «está totalmente agotado en estos momentos y no nos queda más remedio que la manifestación».
Por último, recordó que el ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, prometió en una reunión conjunta entre productores e industrias que «iba a tomar medidas» para evitar la fuerte caída de los precios , pero «se ha quedado sólo en buenas palabras». La organización demanda al Ministerio que aplique la ley, tanto en lo relativo a la calidad de la leche, como en el cumplimiento de las cuotas.
