Macarrones con bechamel
Elaboración
Cocemos los macarrones en una cazuela con agua hirviendo con sal y una cucharada de mantequilla, mientras precalentamos el horno para gratinar.
Una vez que estén cocidos refrescamos con un chorro del agua fría, escurriéndolos bien y reservándolos un poco engrasados con un poquito de aceite para que no se peguen entre ellos.
Preparamos la bechamel (se explica a continuación) y añadimos la mitad del queso rallado.
En una fuente refractaria extendemos un poco de mantequilla, poniendo sobre ella una capa de macarrones y otra de salsa bechamel, alternando así hasta terminar los macarrones, acabando por cubrirlos con queso rallado y mantequilla.
Introducimos en el horno para gratinar a de manera que quede tostado en la parte superior.
Para preparar la salsa bechamel:
En un cazo derretimos la mantequilla y retiramos del fuego. Se añade la harina de maíz, leche fría, sal y nuez moscada, removiendo hasta formar una crema sin grumos.
Volvemos a colocar la salsa en el fuego y continuamos removiendo con una varilla de madera hasta que hierva por espacio de unos segundos.
Semáforo nutricional
El semáforo nutricional es un sistema de colores que permite entender los valores nutricionales de una forma clara, rápida y completa.
Una ración contiene
Calorías | Grasa | Grasa saturada | Azúcares | Sal |
---|---|---|---|---|
773 | 28,6g | 14,6g | 9,5g | 0,9g |
39% | 41% | 73% | 11% | 15% |
* de la ingesta de referencia (IR) para un adulto
- Baja: el 10% o menos de la ingesta de referencia
- Media: entre el 10% y el 35% de la ingesta de referencia
- Alta: más del 35% de la ingesta de referencia
Las recetas presentan normalmente ingredientes cuyo porcentaje sobre la Ingesta de Refencia (IR) es alto (predominan amarillos y naranjas). Estos platos están concebidos como plato principal de una comida o cena, con lo que su tamaño de ración es superior y su aporte nutricional es más elevado.
Por este motivo, las recetas tienen puntos de corte diferentes a los de los productos. Así, por ejemplo, mientras que un alimento cualquiera tendrá los nutrientes de color amarillo hasta un valor máximo del 20% de la IR, las recetas concebidas como una comida principal tendrán los nutrientes en amarillo hasta un valor máximo del 35% de la IR.
Calorías | Grasa | Grasa saturada | Azúcares | Sal | |
---|---|---|---|---|---|
Qué es bajo por ración | 200 Kcal o menos | 7 g o menos | 2 g o menos | 9 g o menos | 0,6 g o menos |
Qué es medio por ración | Entre 200 Kcal y 700 Kcal | Entre 7 g y 25 g | Entre 2 g y 7 g | Entre 9 g y 32 g | Entre 0,6 g y 2,1 g |
Qué es alto por ración | 700 Kcal o más | 25 g o más | 7 g o más | 32 g o más | 2,1 g o más |
Nutrientes | Cantidad Diaria Orientativa |
---|---|
Calorías | 2.000 Kcal |
Grasa | 70 g |
Grasa saturada | 20 g |
Azúcares | 90 g |
Sal | 6 g |
La Ingesta de Referencia (IR) es una guía sobre la cantidad total de calorías y de varios nutrientes que debemos ingerir al día para mantener una dieta sana. La información sobre los porcentajes de IR indica lo que supone la cantidad de nutriente de una ración respecto a la IR para ese nutriente en el día.
Los porcentajes de Ingesta de Referencia (IR) están calculados para una mujer adulta con una ingesta diaria de 2000 Kcal. Las necesidades nutricionales individuales pueden ser más altas o más bajas, en función de sexo, edad, nivel de actividad física y otros factores.
Este es un plato de gran aceptación, que puede formar parte del menú habitual en todas las estaciones del año. La pasta aporta esencialmente los hidratos de carbono complejos; el almidón representa la fracción mayoritaria de este alimento lo que hace que tenga un valor energético alto. Esta característica hace que sea un plato recomendable en la dieta de personas que precisen de energía como los niños, adolescentes, deportistas y profesionales con una actividad física intensa. Asimismo en situaciones de convalecencia, cuando haga falta aumentar el aporte energético, la pasta es un buen alimento para conseguirlo.
El perfil proteínico del plato está formado por las proteínas de calidad que aportan la leche y el queso. Al ser los macarrones un alimento con un bajo contenido mineral y vitamínico, se complementan con las vitaminas A y D y el calcio de los lácteos.
Todo ello hace que este plato sea bastante completo y que junto a una ensalada con algún ingrediente proteínico y una fruta de postre, resulte una comida perfectamente equilibrada.
Si se utilizan lácteos descremados para la bechamel y se tiene cuidado con la mantequilla, esta receta puede estar incluida en un menú para dietas de control de peso, ya que aporta los hidratos de carbono imprescindibles también en este tipo de tratamientos.
- Ácido úrico y gota
- Alergia al huevo
- Alergia al pescado
- Anemia ferropenica (falta de hierro)
- Anemia perniciosa (carencia de vitamina B12)
- Anemia por carencia de ácido fólico
- Diabetes mellitus
- Estreñimiento
- Gastritis
- Osteoporosis
- Alergia a la caseína
- Cálculos en la vesícula biliar
- Cálculos renales
- Hipercolesterolemia
- Hipertensión arterial
- Hipertrigliceridemia
- Intolerancia a la lactosa
- Intolerancia al gluten (celiaquía)
- Meteorismo
- Obesidad o sobrepeso