Pasta fresca de espinacas con salsa de ciruelas

Elaboración
Cocemos en agua hirviendo con sal la pasta fresca de espinacas (se cocina antes que la pasta seca empaquetada).
La pasta fresca se debe conservar hasta el momento del consumo en la nevera.
Una vez cocida la pasta la refrescamos bajo el chorro de agua fría y le agregamos un chorrito de aceite de oliva para que quede mas suelta.
En una sartén con las 2 cucharadas de margarina salteamos las ciruelas pasas y los dátiles sin hueso todo ellos troceados.
A continuación agregamos la nata líquida y el caldo de verduras (se puede sustituir con un poco de agua y pastilla de concentrado de verduras) y dejamos que hierva el conjunto hasta formar una salsa cremosa.
Calentamos la pasta en el momento de servir en una sartén con un poco de aceite y una vez en lo platos de servicio salseamos con la crema de ciruelas y dátiles.
Semáforo nutricional
El semáforo nutricional es un sistema de colores que permite entender los valores nutricionales de una forma clara, rápida y completa.
Una ración contiene
Calorías | Grasa | Grasa saturada | Azúcares | Sal |
---|---|---|---|---|
708 | 32,5g | 14,8g | 31,7g | 0,6g |
35% | 46% | 74% | 35% | 10% |
* de la ingesta de referencia (IR) para un adulto
- Baja: el 10% o menos de la ingesta de referencia
- Media: entre el 10% y el 35% de la ingesta de referencia
- Alta: más del 35% de la ingesta de referencia
Las recetas presentan normalmente ingredientes cuyo porcentaje sobre la Ingesta de Refencia (IR) es alto (predominan amarillos y naranjas). Estos platos están concebidos como plato principal de una comida o cena, con lo que su tamaño de ración es superior y su aporte nutricional es más elevado.
Por este motivo, las recetas tienen puntos de corte diferentes a los de los productos. Así, por ejemplo, mientras que un alimento cualquiera tendrá los nutrientes de color amarillo hasta un valor máximo del 20% de la IR, las recetas concebidas como una comida principal tendrán los nutrientes en amarillo hasta un valor máximo del 35% de la IR.
Calorías | Grasa | Grasa saturada | Azúcares | Sal | |
---|---|---|---|---|---|
Qué es bajo por ración | 200 Kcal o menos | 7 g o menos | 2 g o menos | 9 g o menos | 0,6 g o menos |
Qué es medio por ración | Entre 200 Kcal y 700 Kcal | Entre 7 g y 25 g | Entre 2 g y 7 g | Entre 9 g y 32 g | Entre 0,6 g y 2,1 g |
Qué es alto por ración | 700 Kcal o más | 25 g o más | 7 g o más | 32 g o más | 2,1 g o más |
Nutrientes | Cantidad Diaria Orientativa |
---|---|
Calorías | 2.000 Kcal |
Grasa | 70 g |
Grasa saturada | 20 g |
Azúcares | 90 g |
Sal | 6 g |
La Ingesta de Referencia (IR) es una guía sobre la cantidad total de calorías y de varios nutrientes que debemos ingerir al día para mantener una dieta sana. La información sobre los porcentajes de IR indica lo que supone la cantidad de nutriente de una ración respecto a la IR para ese nutriente en el día.
Los porcentajes de Ingesta de Referencia (IR) están calculados para una mujer adulta con una ingesta diaria de 2000 Kcal. Las necesidades nutricionales individuales pueden ser más altas o más bajas, en función de sexo, edad, nivel de actividad física y otros factores.
La pasta es un alimento de obligada presencia cuando se habla de dieta mediterránea. Su características organolépticas, su textura blanda, sabor neutro, así como la sencillez, rapidez y facilidad para el cocinado, la convierten en el alimento predilecto para muchas personas.
Este alimento se presta a múltiples preparaciones, y admite todo tipo de alimento o condimento del que se impregna de sabor, y brinda muchas posibilidades a la hora de confeccionar platos muy apetecibles y saludables.
La pasta es un alimento energético, pues su componente mayoritario es el almidón, un hidrato de carbono complejo. No obstante, combinada con alimentos ligeros como las verduras o las hortalizas, el plato no resulta especialmente calórico.
Todo lo contrario a la receta que se presenta, donde la combinación de ingredientes; nata (concentrado de grasa saturada, colesterol y calorías) y las frutas desecadas (con abundantes hidratos de carbono simples), además de pasta, da como resultado un plato eminentemente energético, tan sabroso como calórico. Su consumo está desaconsejado en los menús de las dietas con control de calorías, de grasas y de azúcares.
Por la originalidad de los ingredientes, la composición de sabores y su caracter energético se recomienda en aquellas situaciones en las que se requiera un mayor aporte calórico: crecimiento, embarazo, desgaste físico..., si bien podría convertirse perfectamente en plato completo, precedido de una ensalada variada y una fruta o un lácteo sencillo de postre.
- Ácido úrico y gota
- Alergia al huevo
- Alergia al pescado
- Anemia ferropenica (falta de hierro)
- Anemia perniciosa (carencia de vitamina B12)
- Anemia por carencia de ácido fólico
- Estreñimiento
- Gastritis
- Hipertensión arterial
- Meteorismo
- Osteoporosis
- Alergia a la caseína
- Cálculos en la vesícula biliar
- Cálculos renales
- Diabetes mellitus
- Hipercolesterolemia
- Hipertrigliceridemia
- Intolerancia a la lactosa
- Intolerancia al gluten (celiaquía)
- Obesidad o sobrepeso