Para otorgar de un aspecto acogedor a una vivienda puede optar por adquirir algunos muebles que estén confeccionados con fibras naturales, generalmente de origen vegetal, como el bambú, mimbre, o láminas de madera flexibles entrelazadas y unidas de tal forma que conformen distintos elementos, que se caracterizarán por su originalidad de formas y una ligereza a la que viene ligada su escasa robustez.
Estos materiales naturales conceden al mobiliario un acabado y un colorido diferentes al que proporcionan a los muebles convencionales una capa de pintura o barniz.
Este tipo de sillones, mesas, cabeceros etc. recrean un ambiente cálido y naturista, algo que combinará muy bien con paredes en tonalidades verde claras y muebles de madera, bien pintados o bien barnizados. Otra opción pasa por recubrir los muebles de madera con barniz tinte, dejando al descubierto el veteado y nudos originales de la madera para conferirles un aspecto antiguo y ajado.