Es muy habitual la aparición de separaciones o grietas en las uniones entre los elementos de madera y las propias paredes. Entre otros, este puede ser el caso de los rodapiés o de los marcos de las puertas.
Para solucionarlo se recomienda la utilización de un tubo de masilla flexible que se aplicará con pistola. La idoneidad de utilizar este tipo de masilla y no otra, es por la sencilla razón de que los marcos de las puertas y rodapiés son elementos que tienen que soportar ligeras oscilaciones bien sea por el abrir y cerrar de las puertas o por el paso mismo de la gente.
Con el tubo de masilla en la mano, se colocará en la pistola y se cortará la boquilla. Apretando el gatillo se irá aplicando de manera uniforme el adhesivo sobre la zona a tratar y cuando se haya acabado, se repasará la tira de masilla con un dedo mojado con el fin de extender la masilla homogéneamente.
Esta labor requiere cierta paciencia, pero tomándolo con tranquilidad, en una tarde se pueden arreglar todas las uniones y juntas que anteriormente estaban agrietadas.
