Los soportes para taladros permiten realizar agujeros en el lugar preciso y con la profundidad deseada, aunque el pulso no sea del todo firme. Estos utensilios aportan a la taladradora la estabilidad y precisión que no puede lograr la mano humana. Sus mecanismos permiten regular la distancia de separación y ubicación de los agujeros que se han de realizar de manera muy precisa.
Sin embargo su utilización, además de ventajas presenta algunos inconvenientes, que es necesario valorar antes de comprar.
Entre sus ventajas se destaca que:
– Por un módico precio se pueden realizar orificios perfectamente centrados y de la profundidad y tamaño deseados.
– Regular la profundidad del agujero se convierte en un proceso muy sencillo. Además estos soportes impiden que la broca resbale sobre superficies lisas o que se obtengan agujeros de más profundidad de la requerida.
También es cierto que hay algunos inconvenientes como los que a continuación se señalan:
– Puede resultar complicado fijar el soporte sobre superficies pequeñas, lugares de difícil acceso o zonas inclinadas.
– Comprobar que el soporte puede ser manipulado con las tradicionales llaves allen o con un destornillador convencional. Si requieren herramientas específicas, hay que tener en cuenta que pueden llegar a perderse o deteriorarse, inutilizando el soporte.
