Si dispone de un mueble antiguo puede tratar de decorarlo de manera llamativa y emplearlo como expositor de fotografías antiguas o en blanco y negro, que realzan el ambiente clásico.
Para decorar el mueble puede decantarse por varias técnicas, aunque una muy atractiva y eficaz para este caso es la del decoupage. Otras opciones pasan por decapar el barniz o pintura que lo decore, lijar bien la superficie del mueble, empleando a posteriori un cepillo de púas en dirección de la veta para acentuar ésta, y que sea la que decore el propio mueble, aplicándole una capa de tinte o barniz-tinte para protegerlo y dejar a su vez a la vista el veteado.
Si quiere otorgarle un aire más sugestivo que envejecido, puede optar por pintar el mueble con un spray de color gris, para aportarle un aspecto metalizado. No es necesario integrar el mueble en la decoración circundante porque en este caso se pretende que el aparador que sirva de soporte a las fotografías sea vistoso y llame la atención. También las fotografías pueden enmarcarse con marcos de diseño llamativo.
