El Tribunal de Defensa de la Competencia ha sancionado a las filiales españolas de cinco de las grandes distribuidoras norteamericanas, además de la Federación de Distribuidores Cinematográficos (FEDICINE) en la que se engloban, por llevar a cabo «prácticas anticompetitivas».
La sanción impone multas de 2,4 millones de euros a las filiales The Walt Disney Company Iberia/Buenavista International Spain; Sony Pictures Releasing de España S.A.; Hispano Foxfilm S.A.E.; United International Pictures S.L.; y Warner Sogefilms A.I.E. Además, FEDICINE es sancionada con 900.000 euros, según informó en una nota la citada institución, que insta además a dichas compañías a «abstenerse» de seguir llevando a cabo estas prácticas «en el futuro». El expediente se inició tras la denuncia contra las citadas distribuidoras, por parte de la Federación de Entidades de Cine de España (FECE), que representa al sector de la exhibición, el 6 de febrero de 2003.
Estas compañías han infringido el artículo 1 de la Ley de Defensa de la Competencia, «al haber concertado sus políticas comerciales hacia los exhibidores de cine, repartiéndose, como consecuencia de dicha concertación, una parte sustancial del mercado de distribución cinematográfica», según señala la resolución. El tribunal considera que las empresas denunciadas «concertaron sus políticas comerciales frente a los exhibidores de cine» y esa concertación se pone de manifiesto «al comprobar la identidad casi generalizada de las cláusulas de los contratos-tipo que vinculan a las distribuidoras imputadas con los exhibidores».
«De la identidad en las cláusulas de los contratos tipo y de las características de los mecanismos de reparto de los ingresos por recaudación en taquilla, se concluye que las distribuidoras denunciadas actúan de forma concertada, táctica o expresamente, y, por tanto, no compiten entre sí a la hora de negociar las condiciones comerciales de exhibición de sus películas en cines, lo cual puede derivar en perjuicios no sólo para los empresarios cinematográficos sino, directa o indirectamente, también para el consumidor final», añade la resolución.
El tribunal declara también que FEDICINE, a la que pertenecen las distribuidoras denunciadas, también ha infringido la Ley «al elaborar una base de datos de acceso restringido, con información sensible para el diseño de estrategias comerciales», como las cifras de recaudación de las películas, por salas y semanas de exhibición. Además, en el marco de la federación, las empresas denunciadas «se intercambiaban información sobre las previsiones de sus estrenos, con gran antelación», y así «logran evitar que coincidan en la misma fecha el estreno de dos películas populares».